La imagen de la Divina Pastora salió ayer en procesión por las calles de Melilla la Vieja, portada, como marca la tradición, por un grupo de mujeres del barrio del que la virgen es patrona. Previamente, a las siete y media de la tarde se celebró en la Parroquia de la Purísima Concepción la Misa de acción de gracia a la Virgen de la Divina Pastora. La ceremonia la ofició el vicario episcopal, Roberto Rojo. Decenas de creyentes, entre ellos destacados miembros del Gobierno de la Ciudad Autónoma, encabezados por el presidente Juan José Imbroda, se sumaron a la conmemoración y asistieron a la Eucaristía cantada por el Coro Rociero de la Hermandad del Rocío.