Varias horas después del altercado en la oficina de Correos, el PP acusó a Coalición por Melilla (CPM) y a Populares en Libertad (PPL) de haber orquestado “el tinglado”, utilizando para ello cámaras y todos los medios de los que disponen tanto el partido de Ignacio Velázquez como el grupo mediático de Gustavo Cabanillas. “Estaba todo preparado, porque van a perder las elecciones y por eso están como están. Significa desesperación”, afirmó el candidato del PP, Juan José Imbroda, que advirtió a los melillenses de que lo sucedido en Correos “es lo que le espera a esta ciudad, en cualquier aspecto de la vida social y política, si CPM gana las elecciones”. Imbroda acusó a “Mustafa Aberchán y compañía” de estar “coaccionando, insultando y amenazando a gente que honestamente va a Correos a hacer lo que les da la gana”. Por ello, pidió que se refuerce la seguridad en Correos, con el “suficiente blindaje para que quien quiera ir pueda votar en libertad sin problemas y que esta pandilla de sinvergüenzas dejen ejercer el voto libremente”. Ahora, dijo, es imposible porque en la puerta hay “una amalgama de gente en la puerta” que “asusta” a los ciudadanos. “Melilla se ha convertido en Nigeria para votar por correo”, lamentó.
Sobre lo sucedido ayer, explicó que los votos que miembros de su partido habían llevado a la oficina postal son de personas de los barrios periféricos, habitualmente personas de confesión musulmana, que tienen miedo de ir a votar a la urna y a presentar su voto por correo porque “les asustan” desde CPM, partido al que tradicionalmente ha acusado de pedir el voto basándose en la religión.
Según Imbroda, esa es la razón que lleva a muchos melillenses de la periferia hasta la sede del PP, donde piden que les hagan los trámites para ejercer su derecho al voto. “No es ilegal depositar 15 o 20 votos. Lo que es ilegal es comprarlos y engañar como hicieron PSOE y CPM en 2008”, puntualizó Imbroda en alusión al caso voto por correo, en el que la Fiscalía pide penas de prisión que suman 231 años para los 30 imputados socialistas y cepemistas imputados por participar presuntamente en una trama de compra de votos a cambio de empleo financiado por el Estado.
Imbroda mostró también las dos denuncias que se presentaron ayer mismo en el juzgado de guardia por vejaciones a sus compañeros de partido durante el altercado, y acusó a CPM y a PPL, de montar este “tinglado” con sus cámaras porque están “desesperados” ante las expectativas electorales, que sitúan al PP como vencedor este domingo.
“No les salen las cuentas, saben que van a perder”, agregó Imbroda, que dejó claro que “el voto musulmán no es cautivo, es de todos, por mucho insulto que haya”.
