Este sábado se constituirán más de 8.100 ayuntamientos y gobiernos autonómicos en toda España, una vez cumplidos los 20 días que marca la Ley Orgánica del Régimen Electoral General (LOREG) desde la celebración de las elecciones del pasado 24 de mayo. Melilla estaba entre esos consistorios que hoy arrancarán oficialmente la legislatura, e incluso tenía hora y lugar fijados: a las 12.30 en el Salón Dorado. Sin embargo, el acto tuvo que ser pospuesto al próximo 3 de julio después de que Equo y Coalición por Melilla (CPM) presentaran sus respectivos contenciosos electorales. Es la tercera vez consecutiva que la Asamblea de Melilla se queda sin toma de posesión hasta el verano, después de que CPM también presentara sendas impugnaciones en 2007 y 2011. En 2007, la Asamblea no pudo constituirse hasta el 6 de julio, ya que las elecciones se celebraron el 27 de mayo. En 2011, el arranque oficial de la legislatura fue el 1 de julio, 40 días después de los comicios, que fueron el 22 de mayo. La diferencia entre aquellas dos ocasiones y la actual es que entonces el futuro político de la Asamblea de Melilla parecía claro, con la mayoría absoluta del PP. Ahora, sin embargo, ningún partido tiene el mínimo de 13 escaños que necesita para garantizarse la investidura, lo que este retraso contribuye a incrementar esa incertidumbre sobre cómo quedarán repartidos, finalmente, los papeles para los próximos cuatro años.
La decisión de posponer el acto de investidura al 3 de julio fue tomada por la mañana, después de que Equo presentara su contencioso electoral contra la proclamación de diputados electos a primera hora de esta mañana pidiendo que se repitan las elecciones por considerar que ha podido haber irregularidades con el voto por correo.
CPM, por su parte, lo presentó sobre las ocho y media de la tarde, basado en el color diferente de las papeletas y sobres de unos 1.300 votos del Partido Popular (PP), lo que a juicio de los cepemistas impide el secreto de voto y supone como un intento de controlar al electorado.
Lo que dice la Ley
La LOREG, en su artículo 195.1, establece que “las Corporaciones municipales se constituyen en sesión pública el vigésimo día posterior a la celebración de las elecciones, salvo que se hubiese presentado recurso contencioso-electoral contra la proclamación de los concejales electos”.
En este supuesto, la constitución se pospone al cuadragésimo día posterior a las elecciones, que es lo que ha ocurrido en Melilla, cuya Asamblea también recoge este supuesto en su Reglamento, concretamente en el artículo 2, en el que se indica que si la sentencia ordena la repetición de las elecciones, la Asamblea se constituirá 20 días después de éstas.
El cuadragésimo día posterior a las elecciones es el 3 de julio, fecha en que inicialmente ha quedado pospuesta la constitución de la Asamblea, por lo que hasta entonces el Gobierno de Melilla tendrá que seguir gestionando en funciones durante 20 días más, que serán aprovechados por algunos partidos para seguir dialogando para intentar llegar a acuerdos.
La Presidencia, en el aire
El futuro presidente de Melilla, por tanto, no está claro 20 días después de la celebración de las elecciones, ya que el PP se quedó a las puertas de revalidar la mayoría absoluta y los otros cuatro partidos están estudiando la posibilidad de presentar un candidato alternativo, tal y como reconocieron anteayer en su segunda reunión de esta semana.
La suma de los escaños de estas cuatro formaciones -7 de CPM, 3 de PSOE, 2 de Ciudadanos y 1 de Populares en Libertad (PPL)- les daría la mayoría absoluta frente a los 12 diputados del PP, y supone la única posibilidad que podría desbancar al PP del Gobierno que ha liderado en los últimos 15 años, los 12 últimos con mayoría absoluta.
El PP podría garantizarse el gobierno durante cuatro años más con el apoyo de alguna de las otras formaciones o con mayoría relativa si no hay acuerdo entre los partidos de la oposición, algo a lo que Imbroda también se ha mostrado dispuesto llegando a acuerdos puntuales a lo largo de la legislatura.
