Fue sobre la 1,30 horas de la madrugada del martes al miércoles cuando la hija del propietario del céntrico establecimiento “La costa azul”, alertada por la alarma que comenzó a sonar se dio cuenta que el toldo estaba ardiendo por lo que llamó a los bomberos. Aunque se desconoce la autoría y las causas del incendio, no se descarta que quienes provocaron el incendio fueran unos jóvenes que pasaron por e lugar, que iban hablando y riéndose, según han señalado unos vecinos de la zona que oyeron al grupo a su paso por la calle momentos antes de que se dieran cuenta del incendio.
Pero lo realmente resaltable fue la decisiva y ejemplar actuación de un joven que pasaba por el lugar y se quitó su propia camisa con la que sacudió el toldo que ardía, logrando apagar el fuego antes de la llegada de los bomberos y al que además no pudieron dar ni las gracias “ya que tras sofocar el incendio, -dijo el propietario a MELILLA HOY- se fue antes de que llegáramos y no pudimos ni saber quien era”.