El Fuerte de Rostrogordo acogió ayer la entrega de diplomas a los cincuenta pequeños que han participado en el primero de los tres campamentos de inglés de quince días de duración que desarrolla en estas instalaciones la ludoteca La Jungla. Los campamentos, dirigidos al fomento del contacto con la naturaleza, incluyen actividades al aire libre como senderismo, yincanas, piscina, además talleres de manualidades o jardinería entre otros, todo ello además potenciando el conocimiento de la lengua de Shakespeare. La viceconsejera de la Mujer, Fadela Mohatar, acudió ayer a la entrega de diplomas a los alumnos y destacó lo positivo de este tipo de iniciativas formativas que promueve la Consejería de Educación durante los meses de verano. Son "campamentos de inglés que combinan el ocio y el entretenimiento con el aprendizaje en un ambiente incomparable. Desde la Consejería la valoración tiene que ser positiva porque han sido muchos los niños que se han beneficiado de estos programas en toda la ciudad".
Dijo que los talleres de inglés, los 20 que promueve la Consejería a través de ocho empresas de la local para más de mil escolares de entre 5 y 13 años, suponen tanto "un alivio importante para los padres" porque se les ayuda a conciliar la vida familiar y laboral, como para los propios alumnos, porque "pasan unos días inolvidables aprendiendo inglés y disfrutando de actividades de ocio en verano".
Laila Mimón Bumedien, gerente de la Ludoteca La Jungla, agradeció a la Consejería el darles la oportunidad de desarrollar este proyecto que se lleva a cabo "con mucha ilusión y rodeada con un equipo en condiciones". Recordó que son tres los campamentos que llevan a cabo este año, todos ellos enfocados al fomento del contacto con la naturaleza. El campamento es de 9 a 14 horas y aunque los niños llegan con su desayuno, a media mañana se les da a todos fruta del día. Señaló Laila Mimon que además de las actividades en el Fuerte, también se llevan a cabo otros talleres en el centro de ocio de La Jungla para niños más pequeños, a los que se les proponen actividades que buscan que conozcan la ciudad en la que viven.
La programación de actividades en el Fuerte es variada. Suelen comenzar con caminatas o visitas al mirador de Rostrogordo, para continuar con los talleres de flora y fauna, manualidades y, claro está, actividades en la piscina. "Además desarrollamos juegos deportivos, yincanas acuáticas, talleres, y lo cierto es que el día se pasa volando y a veces no nos da tiempo a completar lo previsto en cada jornada, por ese motivo en el segundo campamento que se inicia el lunes podremos realizar el taller del jardín vertical y el de paisajismo, así como el de elaboración de llaveros". Afirmó que tanto alumnos como padres están muy satisfechos con este campamento que cuenta con diez monitores, entre un profesor nativo de inglés, monitores de ocio y tiempo libre, maestros de educación infantil y educación especial, y un técnico de actividades deportivas.
