Mal empieza el club, pese a la buena voluntad de su máximo dirigente. Trabaja en el próximo proyecto sin haber cerrado aún el anterior. Los problemas no cesan y las dudas en el plano económico se acentúan. El presidente quería ser optimista en su discurso, pero el panorama de la entidad invita a todo lo contrario La plantilla de la U.D. Melilla 2015-16 comenzó la pretemporada el pasado martes a las 19.30 horas, pero media hora antes su presidente, Cristóbal Sánchez, dio una rueda de prensa a los medios de comunicación. Su planteamiento creaba muchas dudas y no aclaraba en nada el panorama de viabilidad del club decano de la ciudad.
Por un lado daba motivos para la esperanza pero rápidamente la realidad hacía pensar todo lo contrario, según se entendía en su discurso. Aseguró que las reuniones con las autoridades de la Ciudad Autónoma habían sido satisfactorias y aseguraba garantías de pago del tercer plazo para la plantilla de futbolistas.
Las cifras no dan lugar a las dudas. Se lamentó de la losa que viene lastrando el club en el aspecto económico, informó que la deuda es de un millón de euros en conceptos de seguridad social y de 80.000 euros de hacienda. "Al principio debíamos 2.700.000 euros, pero lo importante es que hay voluntad y ganas de trabajar por un proyecto de ciudad", señaló cariacontecido.
Pese a la grave crisis económica que sufre el club, afirmó lo siguiente: "No voy a permitir que esto se vaya al traste, ni voy a tirar la toalla. Vamos a seguir adelante y fichando bien. Somos los únicos que hemos cumplido, con el setenta y cinco por ciento de futbolistas locales. No nos hemos metido con nadie y sólo pido que nos dejen trabajar, que así somos felices", dijo en su mensaje para navegantes.
Pero los grandes damnificados de esta historia son sus futbolistas. Todavía no se les ha abonado el tercer plazo y Cristóbal Sánchez anunció que les daría una fecha de cobro definitiva el pasado viernes. Al parecer, según ha podido saber MELILLA HOY, el presidente de la U.D. Melilla informó a sus futbolistas que la fecha de pago será antes de septiembre, desde que el pasado 30 de junio acabase el plazo para hacer frente a las nóminas de los jugadores.
Mal empieza el club, pese a la buena voluntad de su máximo dirigente. Trabaja en el próximo proyecto sin haber cerrado aún el anterior. Sólo se ha llevado a cabo un fichaje, el del meta Dani Barrio, procedente del C.D. Leganés, y el resto está en proceso de ejecución. Es decir, el plantel ha comenzado la pretemporada con lo justo.
Y lo peor es que los jugadores están cansados de promesas incumplidas sobre la fecha del pago y no están dispuestos a repetir otra campaña igual que la anterior. Si no se abona las cantidades antes de septiembre puede haber un nuevo culebrón y este en forma de posible desaparición, si no lo remedia el presidente y su Junta Directiva. Los problemas no cesan y las dudas en el plano económico se acentúan. El presidente quería ser optimista en su discurso, pero el panorama de la entidad invita a todo lo contrario.
PD.- LA INJUSTICIA COMETIDA CON GALA LEÓN Y EL GOBIERNO DE MELILLA: Lo ocurrido con el cese de Gala León es una muestra de las injusticias que a veces se cometen en la vida. La hasta hace poco seleccionadora del tenis nacional fue apartada de su puesto tras las quejas de un sector del tenis español, especialmente de Rafa Nadal y su tío Toni. Sin embargo, ello, como se ha visto esta pasada semana, no ha servido para que España ascienda de categoría, al perder 3-2 con Rusia, sino que ahora tendrá que luchar por la permanencia en la próxima eliminatoria contra Dinamarca. El cambio de Gala León por Conchita Martínez, por lo visto, no ha servido de mucho. Como tampoco parece que vaya a servir el cambio de Miguel Marín y María Antonia Garbín en el Gobierno de Melilla, por otra injusticia igualmente impuesta en el pacto de gobernabilidad PP-PPL, y si no, tiempo al tiempo. Como tampoco se va a entender la posible permanencia de Daniel Conesa en la Consejería de Economía y Hacienda, después de lo vivido estos últimos tiempos, en los que los impagos a empresas y entidades de diversa índole han sido la tónica predominante, debido a una al parecer "rebelión" de algunos funcionarios, que no se supo ser atajada de manera conveniente.
