El presidente de Melilla, Juan José Imbroda, reestructurará su Gobierno, que tomó posesión este lunes, para reducir el número de Viceconsejerías que actualmente lo componen y evitar de este modo la ruptura del acuerdo de gobernabilidad firmado entre PP y Populares en Libertad (PPL) el 2 de julio. Así lo decidieron ayer los máximos responsables de ambos partidos, que ayer se reunieron durante más de tres horas después de que la formación liberal advirtiera de que no se había cumplido la literalidad del pacto en cuanto a las Viceconsejerías porque ahora son más que en el anterior mandato. El acuerdo al que han llegado es que las 14 actuales se queden por debajo de las 12 que existían al principio de la legislatura 2011-2015. Por el momento se desconoce las Viceconsejerías de las que prescindirá Imbroda en la reestructuración de su Ejecutivo para adaptarse a lo que dice el acuerdo. Lo único que ha trascendido de la reunión sobre este aspecto es que el presidente melillense hará un estudio y que hablará con PPL para fijar el reajuste tras esta primera crisis oficial de Gobierno.
“Se va a mirar la estructura actual y en función de lo que se considere más interesante para el funcionamiento de la Administración, así se adoptarán las medidas”, afirmó en declaraciones a MELILLA HOY el portavoz de la Ciudad Autónoma, Daniel Conesa, que fue una de las 7 personas que estuvo en la reunión. Junto a él estuvieron Imbroda, Manuel Ángel Quevedo y Sofía Acedo por parte del PP, e Ignacio Velázquez, Paz Velázquez y José Ruiz Olivares por la del PPL.
Personal eventual
También adoptarán medidas para cumplir la literalidad del pacto en lo que se refiere al personal eventual de confianza, que nombra directamente el presidente de la Ciudad Autónoma, y que quedará fijado en un máximo de 25 personas, frente a las 32 que eran en el anterior mandato.
En este sentido, Conesa explicó que el pacto indica que los familiares de miembros del Gobierno hasta segundo grado y los cónyuges de cargos políticos no pueden trabajar como personal eventual. Para ello, se adoptarán medidas, algunas de carácter interno del partido para que se pueda cumplir “sin perjudicar a nadie”.
El portavoz explicó que en los próximos días se adoptarán este tipo de medidas tras ser acordadas en la reunión celebrada ayer, de la que ha dijo que fue interesante, cordial y “bastante larga”, ya que se prolongó durante más de tres horas.
Un encuentro en el que se habló “mucho de gestión y de “comenzar inmediatamente” la gestión de la Ciudad Autónoma, que se ha visto “ralentizada” desde la celebración de las elecciones el pasado 24 de mayo por las impugnaciones presentadas y la sucesión de actos que se han producido este mes, entre la sesión constitutiva de la Asamblea, la investidura y la toma de posesión del Gobierno.
La voluntad de ambos partidos, dijo Conesa es la de “continuar contribuyendo a la gobernabilidad de Melilla” y mantener el pacto firmado hace apenas tres semanas. “Es un camino importante el que empieza en esta legislatura, que al final será positivo para los ciudadanos, que es lo que ambos partidos queremos”, apuntó el portavoz.
Reuniones periódicas
Reuniones como la de ayer se mantendrán de manera periódica, al menos una vez al mes o “cada vez que haga falta”, apuntó Conesa, que se mostró partidario de que esta comisión de seguimiento se reúna cuando surja algún problema para dilucidarlo entre ambas partes en lugar de exponerlo públicamente ante los medios de comunicación, como ha sucedido esta vez. De esta manera, se mostró de acuerdo con lo que por la mañana expuso el presidente de PPL, Ignacio Velázquez, en cuanto a la necesidad de mejorar los canales de comunicación entre ambos partidos.
