La Operación Paso del Estrecho (OPE), que vive en este arranque de agosto uno de sus momentos de mayor tránsito, vivió ayer la tragedia en uno de los barcos de Melilla. Concretamente en el superferry 'Sorolla', de la compañía Trasmediterránea, cuando viajaba desde Melilla hasta Almería. Un inmigrante magrebí que había conseguido colarse en el barco como polizón fue hallado muerto en el interior de la maleta en la que había viajado, que estaba a su vez dentro del vehículo de su hermano. Éste fue quien dio la voz de alarma a la llegada del buque al puerto de Almería, cuando bajó a la bodega a recoger su coche, según han informado a MELILLA HOY fuentes cercanas al caso. Este Periódico ha podido saber que el buque salió con normalidad del puerto de Melilla a las tres de la tarde. Cinco horas después, pasadas las ocho de la tarde, el 'Sorolla' hacía entrada en el puerto de Almería, momento en el que la tripulación ordenó a los pasajeros por megafonía que ya podían bajar a la bodega si habían embarcado con vehículo para proceder al desembarque por la rampa.
Fue entonces cuando uno de los pasajeros pidió ayuda porque al llegar a su coche, se encontró con una situación fuera de lo normal. Fuentes policiales informaron a MELILLA HOY que en realidad lo que había ocurrido es que en el interior del coche había una maleta, dentro de la cual viajaba una persona sin billete. Este polizón era en realidad su hermano, al que intentaron reanimar con un masaje cardiaco sin éxito, tal y como explicaron otros pasajeros que fueron testigos.
No obstante, hasta el muelle del puerto almeriense acudió una ambulancia, si bien el hombre ya había fallecido. Este polizón estaba indocumentado, por lo que cobra fuerza la hipótesis de que pudiera tratarse de un magrebí que, aprovechando la visita de sus familiares y el retorno en la Operación Paso del Estrecho, tratara de llegar a Europa de forma irregular escondiéndose en una maleta.
Un método que no es nuevo
Este método es poco frecuente, pero no novedoso, ya que en otras ocasiones en los controles de seguridad de la frontera de Melilla han sido detectados magrebíes en el interior de equipajes aprovechando el enorme volumen de pasajeros que hay en esta época del año.
El juez de guardia se trasladó hasta el puerto para proceder al levantamiento del cadáver. Los hechos están siendo investigados, aunque presumiblemente este inmigrante falleció por la falta de aire y las altas temperaturas que pudo llegar a alcanzar en el interior de la maleta y del vehículo aparcado en la bodega, donde es habitual el calor por la falta de ventilación.
