La defensa y, sobre todo, la actitud del grupo durante los tres partidos cree que fueron lo más destacable de la gira por tierras andaluzas, en el que los de Alejandro Alcoba se enfrentaron a tres conjuntos de la LEB Plata como el Instituto de Fertilidad Clínicas Rincón, el Aceitunas Fragata Morón y el Covirán Granada. Para Edu Hernández-Sonseca las sensaciones con las que el Melilla Baloncesto regresó de esta primera gira de pretemporada fueron bastante buenas, especialmente tras el último encuentro en Granada. “Más allá del balance de victorias, todo resultó muy satisfactorio. Por ejemplo, al último partido en Granada llegábamos tras dos encuentros consecutivos, tras levantarnos muy temprano y creo que, pese a todo, el equipo jugó muy serio y como el entrenador espera de nosotros. Para mí fue lo más positivo del stage”.
Sin duda, el esfuerzo de disputar tres choques de manera seguida es duro, pero el center azulón aseguró que ‘sarna con gusto no pica’, ya que a los jugadores lo que más les gusta es poder competir. “Ya teníamos ganas de jugar partidos, por lo que nos importó menos el hecho de tener que aguantar tres días consecutivos de máxima exigencia disputando los encuentros”, explicó.
En lo personal, el interior madrileño afirmó sentirse mejor cada día y considera que la preparación que están realizando empieza a dar sus frutos en el apartado físico. “Cada vez me voy encontrado mejor. La falta de competición se nota, pero la pretemporada se ha organizado de una forma muy buena para que nos reenganchemos a esa forma física que es necesaria para la competición. Estaba deseando jugar partidos y dejar un poco al lado el entrenar solo o con el equipo” .
De vuelta a lo que fue la gira, Hernández-Sonseca incidió en que el grupo ha respondido muy bien en defensa, mientras que sobre los problemas en ataque no sintió preocupación, ya que piensa que es cuestión de tiempo que el equipo consiga el dinamismo y acierto que reclama Alejandro Alcoba. “La defensa fue buena, básicamente porque nuestros rivales no consiguieron pasar de 60 puntos, pero también es cierto que ofensivamente aún nos falta. La gran mayoría de los jugadores nos conocemos, pero estamos formando un equipo nuevo, con nuevos sistemas de juego y todavía nos falta algo de acoplamiento”.
Independientemente de ello, el jugador del conjunto melillense hizo hincapié en que en algunos partidos lo que más les penalizó fue el acierto de cara al aro. En este sentido, se mostró convencido de que “la fluidez en ataque vendrá sola y lo más importante es que seamos capaces de que nos encajen pocos puntos”, resaltó.
Mañana martes, la expedición del Melilla Baloncesto emprenderá viaje para afrontar la segunda gira de pretemporada, en la que harán frente a unos partidos de mayor nivel que los anteriores, como destacó el propio pupilo de Alejandro Alcoba. “Jugar ante equipos de LEB Plata, quizás, hace que no juegues con esa competitividad que vamos a necesitar durante la temporada. Ahora, contamos con otros tres compromisos en tres días y ante rivales de un potencial superior como son el Cáceres, que vuelve a la LEB Oro y está con ganas de demostrar, y el Quesos Cerrato Palencia, que es un equipo puntero en la competición y cuyo club siempre ha configurado muy buenas plantillas”.
