El ex del COB, Marcos Suka, lideró a su equipo con una sobresaliente dirección de juego. Además, hay que destacar que la excelente defensa de los melillenses dejaron a los gallegos con sólo tres puntos en el tercer cuarto. De este modo, el equipo de Alcoba afrontó el último cuarto con veintiocho puntos de ventaja.
El Melilla Baloncesto daba el pistoletazo de salida a la competición liguera visitando el Pazo dos Deportes Paco Paz para enfrentarse a Ourense. Los de Alejandro Alcoba llegaban al choque como favoritos, con la moral y la ambición en todo lo alto, mientras que los locales afrontaban el choque con dudas respecto a su forma física, tras una corta y agitada pretemporada.
Y mostraron sus credenciales los melillenses, que fueron siempre mejores y con ventajas en el luminoso gracias a una sólida defensa y un rápido ataque. Pese a eso, no fue hasta el tercer cuarto cuando, con un parcial de 3-20, los visitantes sentenciaron el choque (35-61), aunque en el inicio del último acto Ourense apretó los dientes y, tras un parcial de 12-2, metió el miedo en el cuerpo a los jugadores del decano. Al final, los de Alcoba recuperaron el control defensivo y se acabó la historia.
El Melilla Baloncesto demostró ayer en tierras gallegas, en la jornada inaugural de la LEB Oro, que puede ser uno de los dos candidatos al ascenso a la Liga Endesa en esta temporada. Anoche, en el Pazo Paco Paz ante el COB, el Melilla Baloncesto fue dueño y señor ante un equipo al que superó en todo momento.
Los hombres de Alejandro Alcoba, con una excelente defensa y haciendo un juego muy alegre en ataque y con rápidas transiciones, se colocaron desde el pitido inicial por delante en el marcador electrónico (0-4). Una diferencia que se fue hasta el 2-7 en el minuto 2’30, lo que hizo que Gonzalo García de Vitoria, técnico local, tuviera que mover el banquillo para tratar de frenar el juego atacante de los melillenses. Lo consiguió el preparador local, o mejor dicho el veterano base gallego Pedro Rivero, con nueve puntos consecutivos que permitieron a su equipo empatar el partido a 9 puntos e incluso puso por delante en el luminoso a los suyos por primera y única vez, 11-9.
Pero la superioridad del decano no tardó en volver a hacerse efectiva. El conjunto melillense puso en cancha a Marcos Suka, el ex de COB (que recibió una cálido bienvenida de su ex afición), comenzó jugando como director de orquesta y anotando puntos junto a Edwards y Sonseca, lo que permitió al Melilla Baloncesto irse de nuevo hasta los siete puntos de renta, 11-18, a falta de dos minutos para el final del cuarto.
Esta vez fue Rejón el encargado de sacar del atasco a los locales. Así, con sus puntos volvió a apretar el electrónico (16-18), aunque al final el Melilla Baloncesto se distanció de nuevo para irse al final del primer periodo con 16-22 a su favor.
El parcial del decano siguió aumentando en el segundo cuarto hasta alcanzar el 0-10 que elevó la ventaja de los de Alcoba hasta los doce puntos (16-28, minuto 12).
Con Suka, Edwards y Gatell muy enchufados, el decano consiguió mantener su renta siempre en torno a los diez puntos, aunque Ourense no bajaba los brazos. Los locales peleaban cada balón, aunque no pudieron evitar que los melillenses se fuesen de 15 (21-36). Al final, sin embargo, los gallegos lograron recortar distancias en los minutos finales, pero un triple sobre la bocina de Almazán dejaba el electrónico en 32-42 al descanso.
El choque se rompió por completo en el inicio de la segunda mitad. Los de Alejandro Alcoba salieron aún más enchufados a la pista y, con una defensa asfixiante, consiguieron una ventaja definitiva. Un parcial de 0-10 en la primera mitad del cuarto colocó el 32-52 en el luminoso a falta de 4’30.
Con un COB que ya no confiaba en sus posibilidades y que no encontraba el camino del aro contrario, el resto del cuarto fue coser y cantar para los norte africanos, que solo tuvieron que mantener la intensidad defensiva y asegurar su lanzamientos para que su renta no disminuyese. Los números del final del cuarto reflejan lo que sucedió en la pista, en la que solo hubo un equipo, un Melilla que firmó en estos diez minutos un parcial de 3-20, lo que le llevaba a afrontar el último cuarto con 28 puntos de renta.
Mucho tenían que torcerse las cosas para que los de Alcoba no se llevasen el triunfo, pero durante unos minutos así fue. COB salió a por todas en el último cuarto y Melilla, quizás excesivamente confiado, o cansado, acusó el golpe y encajó un parcial de 12-2 (47-64 a falta de 6 minutos para la conclusión). A partir de ahí, el decano volvió a mejorar en defensa y, aunque seguía teniendo muchos problemas para anotar, logró que, al menos, su rival tampoco se acercase mucho al aro contrario, lo que le permitió mantener su renta en 18 puntos a falta de de 3 para la conclusión (49-67).
La ventaja parecía suficiente, aunque Ourense seguía recortando poco a poco (51-69, minuto 38). Aparecían entonces Sonseca y Zengotitabengoa para acabar con la sequía de Melilla, que respiraba tranquilo (51-71, a 1’46). De ahí al final, no hubo ya historia (55-75).
Gonzalo García: «El Melilla Baloncesto fue superior en ataque y en defensa”
Gonzalo García de Vitoria reconoció que su equipo no había estado a la altura. “Llegábamos a este encuentro casi sin preparación previa, con sólo ocho días de entrenamiento y tres partidos de pretemporada”. El técnico de Ourense comentaba, en esta línea, que “este es un equipo joven que está todavía en construcción, pero estoy seguro de que con el apoyo del público y la llegada de un nuevo pívot el equipo crecerá”. Del Melilla dijo que fue “muy superior en defensa y en ataque”.
Alejandro Alcoba: “El equipo estuvo muy serio, salvo en el cuarto final”
Alcoba calificó de “excelente” su defensa. Así, explicó que no permitieron “tiros fáciles al COB” y lograron que “no superara en ningún cuarto los 16 puntos. Mi equipo estuvo muy serio, a excepción de los últimos diez minutos, cuando es cierto que ya no tuvimos la intensidad de los tres cuartos anteriores”, aseguró. Por otra parte, destacó el trabajo ofensivo de Sonseca, Almazán y Edwards, que estuvieron “perfectos en ataque”, junto “a la salida de Marcos Suka”.
