El Club Voleibol Melilla se está convirtiendo en la gran sensación de la Superliga, trece años después de su regreso a la máxima categoría del voleibol español. Los melillenses sumaron su tercera victoria consecutiva, una en casa y dos a domicilio, tras superar al Textil Santanderina-La Gallofa por un claro 1-3. El equipo que entrena Salim Abdelkader fue justo ganador y además asciende hasta la tercera posición. Este gran triunfo le acerca a su objetivo de lograr la permanencia y por qué no el de soñar con clasificarse para la Copa del Rey.
El conjunto melillense hizo valer su experiencia para remontar el set inicial conseguido por los locales y acabar llevándose el partido, lo que mantiene a los de Cabezón de la Sal en las últimas posiciones una semana más.
Desde los primeros puntos, la iniciativa en el marcador correspondió a un muy serio equipo local, sin apenas fisuras y que lograba aprovecharse de un inicio sin demasiado acierto en labores defensivas del Club Voleibol Melilla. Poco a poco se entonaron los visitantes, pero la ventaja se estabilizaba para el Textil Santanderina-La Gallofa en los tres puntos de renta, situando un 12-9 en el primer tiempo técnico. Había tranquilidad en las filas cabezonenses, con dominio hasta el 23-18 que les hacía acariciar el set, aunque un último intento de reacción de los melllenes hizo que el primer parcial no se resolviera hasta el 25-23 que consiguió anotar Dani Ruiz.
En el segundo set, tras un intercambio inicial de puntos, fueron los de la Ciudad Autónoma los que consiguieron irse en el marcador con una ventaja que creció hasta los cinco puntos con el 10-15 que obligó a José Ignacio Marcos a pedir tiempo muerto, en busca de una reacción que se atisbó con el 13-16. Pero el Voleibol Melilla había cambiado la actitud con respecto al primer parcial y así logró irse seis puntos arriba (14-20), con Noé De Mena firme en el servicio y el bloqueo, obstaculizando los intentos de un Textil Santanderina La Gallofa algo previsible en ataque, lo que acabó llevando la igualada a un set con un 16-25 que dejó algo tocados a los cántabros.
El saque de Gonçalvez y las buenas acciones de Vicente Monfort pusieron el 1-6 en el marcador y cierta inquietud, pero gracias al potente y efectivo servicio de Dani Ruiz llegó el 5-6 y, lo más importante, reenganchar a un público algo adormecido que terminó de creer con el 8-7, en una defensa imposible de Juan Escalona que se convirtió en punto e hizo que el partido tomara un nuevo cariz.
Se alternaban ambos conjuntos aciertos y errores hasta el 15-15, cuando una doble aparición rematadora de Brull puso dos puntos arriba a los locales, aunque el Club Voleibol Melilla reaccionó para igualar y mantener la incertidumbre hasta la veintena de punto, a la que logró llegar por delante el equipo visitante. Con el 19-21 hubo tiempo muerto local que aclaró las ideas y devolvió la igualdad a 21 puntos, pero en el tramo final los puntos decisivos cayeron del lado visitante y con ellos el tercer set por 22-25.
Con tensión e igualdad se inició el cuarto parcial, aunque la solidez melillense en la red les puso en ventaja de tres puntos (6-9), que obligaba a redoblar esfuerzos al Textil Santanderina si quería sacar mantenerse vivo en el choque y forzar el ‘tie break’. Pero la reacción necesaria no terminaba de llegar y los puntos seguían cayendo con más frecuencia del lado visitante hasta un 14-21 que dejaba el partido más que encarrilado para un Melilla que desbarataba cualquier intento local de soñar con la remontada. No bajaron los brazos los de Cantabria, pero finalmente hincaron la rodilla por 18-25 y los tres puntos volaron desde Cantabria con destino a Melilla.
El próximo encuentro de los melillenses será en casa, ante otro de los gallitos de la competición, el Usuhaïa Ibiza Voley, que ocupa la cuarta posición, igualado a 8 puntos con los melillenses. El encuentro se disputará enel Pabellón de Deportes Javier Imbroda, a partir de las 17’00 horas.
Precisamente, el conjunto ibicenco cayó derrotado en un impresionante partido en el Pabellón de Los Pajaritos, ante unos 650 espectadores. El Río Duero San José remontó de manera increíble un encuentro que tenía prácticamente perdido y que acabó ganando gracias a una explosiva mezcla de coraje, pundonor y buen juego.
El 3-2 final fue fruto de una reacción inesperada del equipo celeste, que vio como el juego de su rival era muy superior en los primeros sets, en los que el Ibiza bordó el voleibol pasando por encima al conjunto local, con una eficacia en ataque y defensa que le hacía inexpugnable.
El 'tie break' fue de los que hacen afición. De primeras, el Ibiza pegó primero (0-2) y llevó las riendas del marcador hasta el 7-8. A partir de entonces, un remate de Sevillano y otro de Salvador pusieron por delante a los locales y las gradas enloquecieron. El Río Duero San José estaba lanzado y con unos últimos minutos espectaculares consiguió un triunfo inolvidable por 15-12 que hace ver de lo que puede ser capaz este equipo en la Liga.
