La Secretaría de Estado de Seguridad ha elaborado un protocolo de actuación en las áreas de custodia de detenidos de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado así como nuevos parámetros para la adecuación de estos espacios, atendiendo a la línea de sugerencias emitidas por el Defensor del Pueblo y órganos interministeriales relacionados con esta materia.
Su finalidad es garantizar un tratamiento adecuado a las personas privadas de libertad en dependencias policiales y de la Guardia Civil, así como dotar de mayor seguridad jurídica a los funcionarios que realizan estas labores en dichas dependencias, según informa el Ministerio del Interior.
Dentro del catálogo de normas destacan la conservación y adecuación de las instalaciones de los centros de detención, que serán revisadas en cada cambio de turno, la existencia de un plan de emergencia específico con formación del personal de custodia, información médica o psicológica y de peligrosidad sobre el custodiado para los funcionarios encargados de su custodia.
Además, los centros de detención dispondrán de sistemas de video-vigilancia con grabación continua, con atención al derecho a la intimidad, informando de su existencia a las personas privadas desde el primer momento.
Un sistema especial permitirá a los detenidos comunicarse con el personal de custodia, y los funcionarios realizarán rondas periódicas por la zona de custodia a fin de poder comprobar el estado de las personas detenidos.
Se habilitarán celdas independientes para usos específicos y formación específica y permanente en los procedimientos de actuación para los policías y guardias civiles encargados de la custodia de las personas detenidas.
Asimismo, se ha elaborado un catálogo de instrucciones técnicas que deberán ser respetadas obligatoriamente en la nueva construcción de las Áreas de Detención, en dependencias de la Policía Nacional y de la Guardia Civil.
Los requisitos que impone el catálogo de instrucciones técnicas recoge la necesidad de controles de acceso, vigilancia de detenidos y alarmas para evitar fugas. La habitabilidad de los espacios se garantizará de acuerdo a su capacidad de ocupación y correcta ventilación e iluminación.
Se obliga al uso de materiales seguros y de alta durabilidad, para evitar riesgos de accidentes, autolesiones o agresiones y acciones vandálicas y se desarrollará un Plan de Evacuación y Emergencia específico, dentro del Plan general del edificio en el que se ubique el Área de Detención.
