La Casa de Melilla en Sevilla continúa con sus excursiones a todas aquellas localidades que "por azares de la vida" pertenecieron a los Duque de Medina Sidonia, conquistadores de Melilla en el año 1497. Así, explica que en el año 1368 se le concede a Juan Alonso de Guzmán , IV Señor de San Lúcar, el Condado de Niebla de la provincia de Huelva, formado por pueblos como Niebla, Rociana, Bonares, la Palma del Condado, Bollullos par del Condado etc. Y en el año 1445 se les concede el de Duques de Medina Sidonia.
Pues este año, han resaltado desde la Casa de Melilla, siguiendo la tradición han visitado el pueblo de La Palma del Condado, que en su escudo conserva dos calderos de la Casa Ducal, localidad vitivinícola que llegó a tener más de 30 bodegas.
A las 10 de la mañana del día 7 de noviembre llegaron en autobús a la Estación de Trenes de dicha localidad, donde les esperaba el Director de Turismo, Juan Manuel Lagares Romero, el cual les acompañó durante toda la jornada, visitando La Ermita del Valle (edificio mudéjar y el más antiguo de la localidad, una belleza arquitectónica donde se acoge a la patrona del pueblo, La Virgen de Valle), Plaza de España centro neurálgico del pueblo, una plaza peatonal que está rodeada por magníficos edificios de varios estilos y la Plaza del Corazón de Jesús, plaza que está rodeada por dos edificios civiles de los más importantes de la provincia. Un caserío barroco de una gran familia palmerina y la Casa de los Morales, gran familia bodeguera, donde su arquitectura no deja indiferente a nadie.
La Casa consistorial, edificio civil más importante y de gran belleza en el municipio, es prototipo de arquitectura regionalista influenciada de la Gran Exposición Iberoamericana de Sevilla, alberga el archivo municipal donde se podrá apreciar legajos de 700 años de antigüedad. Pasearon por las calles más bellas de la localidad, donde se puede apreciar esa arquitectura civil de los años 40 del siglo pasado, donde los grandes bodegueros palmerinos quisieron reflejar en sus fachadas sus creencias y estilos personales. Finalizaron el recorrido en las Bodegas Millán donde pudieron degustar típicos caldos palmerinos como el vino blanco de uva zalema, el vino de naranja o el Pedro Ximénez.
Y ya para finalizar se dirigieron al Bodegón-Taberna el Chocaito, antigua bodega, donde pudieron degustar platos típicos de la tierra.
