El Club Voleibol Melilla, tras la derrota ante el líder de la Superliga, el CAI Teruel, ya sólo está centrado en el próximo encuentro ante el C.V. Mediterráneo Castellón, conjunto de su liga particular. Los melillenses esperan regresar a la senda de la victoria y así mantenerse en la zona noble de la clasificación. Salim Abdelkader, entrenador del Club Voleibol Melilla, espera recuperar este sábado a Hugo Bravo, lesionado hace dos jornadas de una distensión en el bíceps femoral izquierdo, que le impidió jugar ante el cuadro turolense. El preparador melillense indicó que el jugador colombiano ha evolucionado favorablemente, aunque sigue teniendo molestias, pero por precaución será sometido hoy a una ecografía.
Por otro lado, las estadísticas de la Superliga confirman una semana más al melillense Paco Alcober como el mejor receptor de la competición. El líbero ocupa la primera posición en el ranking, con un total de 143 recepciones y 53’15% de recepciones excelentes, por delante de Carlos Baos, del VP. Madrid, con 100 y 53%.
Los melillenses reanudaron ayer martes los entrenamientos, con vistas a preparar el importante duelo liguero ante el C.V. Mediterráneo, que viene de perder en Ibiza por un contundente 3-0 y está clasificado en la antepenúltima posición. El conjunto castellonense lo intentó durante todo el encuentro, pero volvió a dejar patente que aún está en fase de adaptación a la máxima categoría del voleibol español.
La prensa de Castellón asegura que el equipo todavía incurre en demasiados errores, fruto de la falta de acoplamiento entre sus jugadores, y en esta última jornada debutó además la última incorporación, el opuesto González, que apuntó destellos de calidad pero aún se notó su falta de minutos con sus nuevos compañeros. Precisamente, González ha llegado como sustituto de Lamus Guerra, quien ha recaído de una lesión de ligamentos cruzados y se ha perdido lo que resta de temporada.
Salim Abdelkader indicó que su equipo se juega mucho en este encuentro, pues una victoria lo acercaría bastante al objetivo de la permanencia, «aunque nuestro gran inicio de Liga nos ha situado en la tercera posición y no renunciamos a soñar con la Copa del Rey». En este sentido, cabe recordar que los equipos que concluyan clasificados al término de la primera vuelta en las seis primeras posiciones obtendrán el pasaporte para la Copa del Rey.
Por otro lado, el entrenador del Club Voleibol Melilla valoró la derrota del pasado fin de semana en Teruel y reconoció la superioridad del rival. «El CAI jugo con mucha intensidad en un partido en el que no logramos conectar desde el inicio». Además, la baja de uno de sus elementos clave, el opuesto Hugo Bravo, «no pudo ser compensada con un sustituto eficaz».
De cualquier modo, afirmó que Teruel «es un equipazo y está compuesto por doce jugadores profesionales, pero sobre todo ha jugado muy bien, mientras que nosotros no hemos estado bien en la recepción para poder intentar sorprender a un equipo del potencial de Teruel, en el que tienes que jugar un encuentro perfecto». Además, indicó que tampoco en el «bloqueo jugamos bien y en ataque sólo puntuaba Mario Gonçalvez, con lo cual fue bastante difícil, aunque en honor a la verdad tampoco habría cambiado la historia del partido si hubiera estado Hugo Bravo».
Salim Abdelkader explicó que el conjunto melillense comenzó bien en el bloqueo en el primer set, «pero no defendimos bien ante un rival que fue superior en todas las líneas».
«No nos encontrábamos cómodos y no teníamos oportunidades, mientras que el CAI Teruel destacó en el bloqueo y no hubo manera de que construyéramos con comodidad», aseguró el técnico melillense, quien admitió que el segundo parcial fue un calco al primero. «Intentamos meternos en el partido, pero el rival seguía jugando a un gran nivel y nosotros bajamos los brazos más todavía».
Sin embargo, sólo salvó del partido el buen tercer set de su equipo. «Creo que con los cambios jugamos mejor y maquillamos un poco lo ocurrido, pero fue muy complicado, ya que apenas llegaban los balones al ataque para Mario Gonçalvez y así fue bastante complicado puntuar».
En este sentido, indicó que la mejoría vino por situar a Mario Gonçalvez en la posición de opuesto. «Intentamos mantener un poco la recepción, se notó un poco más de mejoría y al estar más cerca del colocador comenzó a meter puntos con más comodidad».
En definitiva, aseguró que el equipo aragonés ganó con gran comodidad. «El CAI nos tenía bien estudiados y afrontó el partido sin ningún tipo de confianzas, por lo que no pudimos pillarlo por sorpresa».
Por último, estimó que ya sólo queda pensar en el Club Voleibol Mediterráneo, «un equipo de nuestra liga particular», pero lo importante «es que jugamos ahora en casa y hay que intentar sacar el máximo provecho para ganar al equipo castellonense”, concluyó el entrenador melillense.
