Apenas unas horas después de que la puerta del Palacio de la Asamblea acogiera una de las concentraciones más multitudinarias de los últimos tiempos en Melilla como muestra de rechazo por los atentados de París, la IV Maratón “Ciudad de Melilla” se convirtió ayer por la mañana en un nuevo escaparate de la solidaridad de nuestra ciudad hacia la capital gala. Muchos fueron los guiños a Francia que lanzaron los participantes en la prueba deportiva, que estuvo llena de simbolismo de principio a fin. Antes de que se diera el pistoletazo de salida a la carrera, los participantes posaron en la línea de salida y meta con una enorme pancarta en la que se podía leer “Todos Somos París”, ilustrada con el dibujo de la Torre Eiffel rodeado por un círculo emulando el símbolo por la paz, obra del diseñador gráfico Jean Jullien, que se ha convertido en el símbolo del dolor por estos ataques terroristas.
El consejero de Educación, Juventud y Deporte, Antonio Miranda, y el de Seguridad Ciudadana, Isidoro González, sostuvieron con sus manos la pancarta junto a numerosos corredores durante el minuto de silencio que se guardó antes del inicio de Media Maratón. La misma escena, pero en la puerta del Palacio de la Asamblea, sirvió para reiterar la solidaridad melillense durante la entrega de trofeos, en la que voluntarios y ganadores posaron con la pancarta junto al presidente melillense, Juan José Imbroda, mientras se oía la canción ‘Imagine’.
También se vivieron ayer otros momentos de recuerdo y solidaridad hacia París. El campeón de la IV Media Maratón, Francisco Sánchez, dedicó su victoria a Francia, mientras que el ganador del año pasado, Borja Palomo Ramos, cruzó la línea de meta con una bandera francesa.
