La Consejería de Seguridad Ciudadana ha reforzado en los últimos días la seguridad de dependencias municipales cuya custodia depende de la Policía Local, como es el caso del Palacio de la Asamblea. Unas medidas de seguridad que se han tomado tras los atentados terroristas de París y que se complementan con las indicaciones que se han dado a los policías locales y agentes de movilidad para que extremen las precauciones “y abran los ojos” ante cualquier caso en el que puedan intervenir. Según informó a MELILLA HOY el consejero de Seguridad Ciudadana, Isidoro González, estas medidas se van a complementar con otras que se adoptarán más adelante y que ya se habían acordado antes de la masacre en la capital gala, como es la instalación de nuevas cámaras de vigilancia y control en el Palacio de la Asamblea y la Jefatura de Policía Local.
“Estamos estudiando las medidas que se pueden tomar para reforzar la seguridad, que siempre viene bien aumentar. Aunque esto estaba previsto de antes, no ha sido a raíz de los atentados”, indicó el consejero. El concurso de adjudicación de las nuevas cámaras que se instalarán en diferentes dependencias municipales se realizará más adelante.
Chalecos antibalas
Otra de las medidas que se han adoptado es la adquisición de 80 chalecos antibalas para cubrir a toda la plantilla operativa de la Policía Local y los Agentes de Movilidad. González explicó que esta compra ya se ha realizado, pero la Consejería de Seguridad Ciudadana está esperando que la fábrica los suministre, lo que tardará aún un tiempo debido a la demanda de estos elementos de seguridad que se está dando en todo el territorio nacional.
Estos 80 chalecos nuevos fue la primera compra que hizo Isidoro González como consejero de Seguridad Ciudadana, y se sumarán a los 20 que llegaron a principios de junio para la plantilla de la Policía Local, modernos y ligeros, cada uno de los cuales supuso una inversión de 700 euros.
