El candidato de Izquierda Unida- Unidad Popular (IU-UP) al Congreso de los Diputados, Rosendo Quero, explica en una entrevista a MELILLA HOY cómo se enfrentan a estas elecciones generales y en especial en Melilla, donde considera que existe una "dispersión del voto en la izquierda". También Quero relata las medidas programáticas de IU-UP así como los cambios que ha sufrido la formación en los últimos años.
- ¿Cómo afrontáis los últimos días de campaña?
La campaña nos la hemos tomado con mucha tranquilidad porque nos encontramos en una ciudad donde tenemos ocho candidaturas y existe una dispersión del voto en la izquierda que hace complicado de alcanzar un mínimo resultado óptimo.
- ¿Cuál es la causa de que exista esa dispersión de los partidos de izquierda en Melilla?
Desde Izquierda Unida-Unidad Popular (IU-UP) enviamos un comunicado a las diferentes fuerzas de la izquierda diciéndoles que habría que verse para hacer un proyecto común, pero no tuvo ningún resultado. En este sentido, yo creo que no se trata de criticar al contrincante electoral que tras 15 años ha sido el Partido Popular (PP), sino de hacer autocrítica de por qué el resto de fuerzas de izquierda no hacemos un trabajo más en común.
- ¿Y a qué se debe estas diferencias, se trata de cuestiones personales o ideológicas?
Las diferencias programáticas son mínimas y fácilmente de limar, pero supongo que hay intereses partidistas de querer connotar o liderar el proyecto. Por la parte que nos toca, estamos más por un programa en común para la ciudad, que por conseguir un puesto para obtener resultados. Con esto me gustaría recalcar que acabadas estas elecciones, los que quieran, quedan tres años y medio para las próximas municipales por lo que es hora de ponerse a trabajar.
- Respecto al programa, ¿qué medidas consideráis prioritarias y urgentes para mejorar la ciudad?
En el ámbito de Melilla, así como nacional, aunque en nuestra ciudad se agudiza más, hay dos problemas, el paro y la corrupción. Tenemos la tasa de paro más alta del estado y tenemos una corrupción que no tiene que ver con el resto del Estado, ya que es exagerada y descarada, no se cortan ni un pelo. Por eso, esta situación debe ser atajada desde un proyecto político.
Aún así, lo que no se puede hacer es tener el clientelismo político de esta ciudad. Si se mantiene un grupo de personas que andan periódicamente todos los años dando vueltas, sobre que plan de empleo o que cesta de la compra le dan ya que da lugar a un clientelismo político y de votante, en el que están todos en el pesebre y amamantamiento de la subvención, y esto hay que eliminarlo.
Desde Izquierda Unida- Unidad Popular (IU-UP) decimos que los planes de empleo son un camino para atenuar y aliviar la pobreza social, pero debe ser un tránsito para una colocación en un trabajo estable. Rechazamos que los planes de empleo sean un medio de subsistencia de cientos de familias de Melilla.
- Entonces, ¿cuál es la alternativa para los desempleados a largo plazo?
Lo primero es que la poca microindustria de la ciudad que queda, como son pequeñas carpinterías, del mármol, o electricistas, potenciarlas y hay que traer industria a la ciudad, no podemos seguir viviendo de los servicios. Yo creo que somos la ciudad con más cafetería por habitante de todo el país, y no se trata de que no existan cafeterías pero lo que no podemos tender a ser una ciudad dependiente exclusivamente del comercio con el país vecino y de los servicios.
Otra propuesta fundamental es el transporte, queremos una tarifa plana del transporte aéreo y marítimo para los residentes y elaborar un paquete turístico para los no residentes ya que es la única autopista que tenemos. Aún así, reconozco que de años atrás hemos mejorado en la vía marítima, pero lo que no puede seguir sucediendo es que un billete Málaga- Melilla le cueste a un no residente 400 euros, cuando con 300 se va a Canarias a un hotel de cuatro estrellas.
- Sin embargo, la industria es un sector que siempre descartan el resto de formaciones por ser poco competitiva y por la poca extensión del territorio, ¿qué les contestaría?
En esta ciudad teníamos una industria de cerámica, carpintería, ebanistería, muebles que están desapareciendo. Por ello, tenemos que potenciarlos porque tenemos un mercado interno, y tenemos un potencial mercado externo por la frontera.
Lo que evitamos con esto, es lo que hacemos todos los melillenses cuando vamos a la Península: venir a Melilla después de las vacaciones con todos los muebles comprados allí.
- Otro de los problemas que la ciudad sufre es el colectivo juvenil con una alta tasa de desempleo, ¿qué medidas propone IU-UP?
El problema en toda España es que tenemos la juventud mejor preparada de la historia de nuestro país y sin embargo los expulsamos. Todo ello, porque existe una falta de inversión y perspectivas, que provoca que nos estemos empobreciendo social, cultural y profesionalmente porque los jóvenes están en otros sitios del mundo. Insisto, los jóvenes no es que emigren para mejorar la calidad de vida como lo hacían nuestros abuelos, actualmente los jóvenes no necesitan mejorar su estatus social, sino profesional que no lo tienen, y cuando lo tienen acaban en un supermercado o cadena de comida rápida trabajando 12 horas por 300 euros.
- Si bien en Melilla, las cifras señalan que no es un problema de falta de formación sino por el contrario de educación básica…
Sí, aquí tenemos jóvenes muy formados, pero también tenemos unos jóvenes por la idiosincrasia de la ciudad de muy baja preparación. Es un tema cultural que no acabamos de resolver, pero que también está ligado al problema de la masificación de las aulas y falta de centros escolares. Y por otro lado también tenemos el problema de las universidades, no todos los jóvenes que quieren estudiar pueden entrar a las universidades porque no hay espacio físico y no hay carreras de lo que ellos quieren hacer. Además, no todas las familias pueden pagarles unos estudios en la Península.
Esto se convierte en una cuestión económica y no de que los propios jóvenes no quieran desarrollarse cultural y profesionalmente. Además, también faltan escuelas de formación. En Melilla existen, pero son necesarios centros relacionados con la construcción como el modelo de Instituto de Carpintería donde se realice una jornada de trabajo y a pie de campo se de la teoría en las aulas para que puedan salir formados. Y es que ahora las obras en Melilla exportan profesionales de otros sitios.
- ¿Cómo cree que le afectará a IU-UP fuerzas nuevas que parecen posicionarse dentro del espectro político en el que siempre ha estado su formación?
Evidentemente el daño está hecho, no solo a IU-UP sino a los movimientos sociales y obreros que han surgido en la última etapa como las Mareas Verdes. Esto hace que IU-UP no salga reforzada en estas elecciones cuando hace un tiempo atrás tenían una buena perspectiva.
El daño por parte de fuerzas emergentes, como es Podemos, está hecho, con ese viaje hacia el centro y ese paso de parecer un partido radical y luego ya acaba yendo a la derecha, como cuando en el debate político le dijo cuatro veces a Ciudadanos que estaba de acuerdo en algunas propuestas. Ha tenido un claro viaje al centro, un espacio al que ahora mismo todo el mundo quiere viajar y está colapsado, sin embargo, nosotros no queremos ir allí, nosotros somos una formación de izquierda, con un programa de izquierda para los trabajadores.
Se está viendo también el incumplimiento de la legislación electoral en cuanto a la participación de Izquierda Unida y se ha visto en todos los debates. IU tiene una representación en el Parlamento y debe tener una representación en los medios que se incumple, e incluso fuerzas que no tienen representación si están.
- ¿Cree que la renovación de IU-UP con un joven candidato como Alberto Garzón puede llegar tarde?
No ha llegado tarde, sino que estamos en un mundo muy cambiante, sobre todo en el último año. Desde hace ya año y medio en los órganos de dirección a nivel nacional ya hicimos el cambio porque Cayo Lara, el coordinador general, decidió que fuera su última legislatura y cambiar a Alberto Garzón tiene un tiempo y un rodaje y en la asamblea de febrero elegiremos al nuevo coordinador general.
Siempre hemos elegido a gente joven al frente, en las europeas presentamos a gente joven como Javier Couso o Marina Albiol. Nosotros no vamos a desaparecer, estábamos antes, hemos seguido en la larga noche de los 40 años y seguimos estando, y es que estamos asentados en el territorio.
Por ejemplo, nosotros teníamos 1.900 cargos en los municipios, tras los últimos comicios hemos pasado a 3.200, así como 200 más que iban en coalición con otras formaciones, por lo que hemos doblado el número de responsables municipales en gobierno u oposición. Aún así, perdimos diputados autonómicos pero ganamos en territorios, por quienes nos conocen en los pueblos y que presentamos medidas necesarias para estos tiempos.
- ¿Os arrepentís de haber descartado a Pablo Iglesias en las elecciones europeas o de no haber podido converger posteriormente?
No nos arrepentimos de descartar ningún proyecto. Izquierda Unida nació con el referéndum de la OTAN cuando pensábamos que nosotros solos no podíamos cambiar el país, sino que necesitamos aglutinarnos de personas que aunque no piensen exactamente igual que nosotros si defienden un proyecto político de izquierdas y eso es Izquierda Unida por eso es una coalición y no un partido. El tiempo ha demostrado que estos señores lo que quieren hacer es otro proyecto político y para eso está el PSOE para un proyecto socialdemócrata, algo que nosotros no somos.
- ¿Por qué consideran que está ocurriendo esto tanto a IU-UP como a otras fuerzas como puede ser Unión Progreso y Democracia (UPyD)?
No tenemos afinidad con esta formación, pero evidentemente les está ocurriendo lo mismo que a nosotros. Ellos tienen una representación parlamentaria y se les está marginando. A los poderosos, o los que realmente dirigen el país, hay formaciones que no le interesan. Esto es un mercado, los partidos son unos productos y en esta venta del producto, como el debate de este lunes, solo vale el espectáculo.
- Las últimas encuestas publicadas vaticinan a IU-UP una perdida de diputados, ¿qué valoración hace las mismas y cómo se enfrentan al discurso de otras formaciones como el PSOE sobre el voto útil?
El voto útil va en función de los grandes medios de comunicación, tú podrás tener las mejores propuestas y argumentos, pero una imagen en televisión te desmonta todo. Y es que en definitiva aquí tenemos un programa de más de 300 páginas que es difícil de transmitir. Sin embargo, quienes están en televisión y proponen ocurrencias como el contrato único nefasto para los trabajadores, o la bajada del IRPF, pero solo a las clases altas, sí tienen espacios para transmitir su mensaje.
