Emilio Guerra, candidato de UPyD al Congreso de los Diputados considera que tras los resultados electorales el próximo gobierno lo va a tener muy difícil además de mostrarse completamente partidario de la reforma de la actual ley electoral a la que considera injusta. No obstante, “seguiremos trabajando porque tenemos representación en Europa, en el Parlamento Vasco y en casi 170 municipios de España por lo que vamos a seguir trabajando”. “Vamos a seguir trabajando por el proyecto de UPyD”. Así señalaba, Emilio Guerra, tras conocer que su partido perdía la representación parlamentaria. “Teniamos la esperanza de conseguirla en Madrid pero no ha podido ser”.
El político magenta considera que vamos a tener un país muy dificil de gobernar con un Congreso muy fragmentado “en el que han irrumpido una cantidad enorme de partidos nacionalistas y eso es fruto de no haber reformado la Ley Electoral y ahora van a sufrir las consecuencias tanto el PP como el PSOE”. Por tanto, Guerra reitera que el próximo Congreso será difícilmente controlable y “para qué decir del próximo gobierno que pueda salir de esa fragmentación”.
En consecuencia, considera que no nos podemos felicitar ninguno tras los resultados electorales. “Son unos malos resultados para todas las formaciones políticas y no digamos para PP y PSOE”.
También expresó su preocupacisón por el hecho de no disponer en Madrid de un gobierno fuerte y cohesionado “que nos permiteira estar tranquilos para poder pensar por Melilla”.
Además, Guerra piensa que la la Ley Electoral ha mostrado en estas elecciones la cara más injusta, “con la infinidad de partidos nacionalistas que han entrado en el Parlamento frente a los partidos nacionales como en este caso UPyD, IU o el propio Ciudadanos, que no ha conseguido representación en el Senado y sin embrago lo han logrado muchos partidos nacionalistas porque para ellos eran suficientes 30.000 o 40.000 votos mientras que a otros para entrar en esas instituciones nos costaría por encima de los 300.000 y ahora si que tanto PP y PSOE tendrán ganas de cambiarlo, pero ahora se van a encontrar con muchas doficultqdes para hacerlo porque no tienen mayoría”.
