Una melillense, Virginia Veira Font, inició ayer una recogida de firmas en la plataforma Change.org para evitar lo que considera "el trato injusto del Ministerio de Defensa a mi hijo de 2 años" después de que le hayan anunciado desde la guardería militar de Melilla que, con el nuevo año, tendrán que pagar el doble de cuota "por no ser hijo de militares, sino de guardias civiles", a pesar del carácter militar que tiene el Instituto Armado. La petición, que llevaba recogidas 236 firmas en apenas once horas desde que se pusiera en marcha este domingo, está dirigida al "General Segundo Jefe de Melilla y Coronel de la Usbad Melilla". Virginia Veira Font explica que su hijo, de nombre Lucas, tiene dos años, y lleva desde los cuatro meses en la guardería militar de Melilla gestionada por una determinada empresa. Así señala que "al igual que el resto de los niños mi hijo presentó solicitud de admisión (2013), y tras varias renuncias fuimos llamados de la lista de reserva". Tras ser admitido, este es su tercer año de guardería: "Como es habitual en el mes de mayo tuvimos que presentar solicitud para continuar en el centro y sin ningún problema Lucas comenzó el pasado septiembre, pagamos 100 y pico euros de materiales más el mes de julio de 2015 por adelantado, sin que se nos comunicara ningún otro detalle" asegura Virginia Veira en Change.org. Sin embargo, denuncia que el pasado día 30 de diciembre de 2015 a las 12 horas recibieron una llamada de la directora del centro en la que les informaban que "mi hijo Lucas y otro niño más, a partir del día 1 de enero, es decir con apenas 24 horas, tendrían que pagar el doble que el resto de los niños (240 euros) por no ser hijo de militar, sino de guardias civiles, circunstancia que ya conocían desde hace dos años".
A juicio de la madre melillense, esta medida del Ministerio de Defensa "va en contra de la conciliación de la vida familiar y supone un trato discriminatorio a un menor de dos años. Defensa -añade Virginia Veira- va a cobrar con el curso ya empezado únicamente a mi hijo y otro menor más el doble que al resto de niños, sin avisar, habiéndosenos negado el derecho a haber cambiado a mi hijo a otro centro publico, si esta mediada se nos hubiera comunicado en el momento que presentamos la matricula".
La promotora de esta recogida de firmas en Internet señala que "esto no es más que una invitación a mi hijo a marcharse, una forma velada de expulsión ante la imposibilidad de hacer frente al pago mensual de esa cantidad y con todos los plazos cerrados para ser admitido en un centro público".
Virginia Veira Font concluye su exposición indicando que "parece ser que este Ministerio ha olvidado que el dinero de Defensa es dinero público y que con dinero público no se puede tomar esta medida con un niño de dos años".
