Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.
Logo de Melilla hoy

La zona subterránea de Averroes, 14 meses esperando la división de los garajes

melillahoy.cibeles.net fotos 1484 averr

Las viviendas sociales que se alojan en la urbanización de Averroes no han parado de tener problemas desde que entraron en marzo del 2007. Según cuentan los vecinos de diversos bloques, "lo que parecía iba a ser una alegría para las 258 viviendas que Emvismesa nos entregó, nada más ser recibidas, empezaron nuestras lamentaciones". Sin embargo, además de la ya detectada mala ejecución de los edificios, para lo que este mes se iniciaría su rehabilitación, los vecinos sufren un gran problema de "inseguridad" en los garajes donde no aparcan por miedo a que les roben el vehículo. El presidente de la mancomunidad de Averroes, Fernando Gutiérrez, explicó en declaraciones a este diario que desde hace justo unos 14 meses los vecinos solicitaron a la Empresa Municipal de la Vivienda y Suelo de Melilla (Emvismesa) que se dividan los garajes de la urbanización y es que actualmente existe una gran "inseguridad" en los aparcamientos subterráneos.
"No han hecho nada", lamenta el presidente quien señala que los vecinos aparcan sus vehículos fuera ya que temen bajar al mismo garaje o que le roben el turismo. Los motivos los pudo presenciar este diario con un paseo junto a los vecinos por los garajes. Un aparcamiento subterráneo prácticamente vacío, y es que los pocos vehículos que se podían ver estaban calcinados o despiezados. Incluso los vecinos contaban como habían encontrado coches robados en los bajos del edificio.

Además, en el garaje también se encuentran diversos trasteros con las cerraduras reventadas, e incluso con gente viviendo en el interior sin ser los propietarios de dichos trasteros. Pocos son los vecinos que se atreven a dejar cosas de valor en el interior, tras los numerosos robos que han sufrido.

Los vecinos consideran que si se dividieran los garajes no habría tanta posibilidad de entrar tanto en los propios garajes -aunque las puertas eléctricas ahora mismo están destrozadas- ni pasar de bloque en bloque. Y es que incluso quienes entran acceden hasta los portales del edificio.

De la ilusión a la desesperación
Según contó uno de los vecinos en representación de diversos bloques, los garajes son uno de los problemas, pero explica que ha sido un largo historial de sucesos. En marzo del 2007 "lo que parecía iba a ser una alegría para las 258 viviendas que Emvismesa entregó, se convirtieron en lamentaciones".

Y es que "al ver que el ensueño de edificio que tenia tan buena pinta exteriormente al verlo más de cerca se veían los garrafales defectos y fallos de construcción fruto de una ejecución con supuestamente escaso control técnico".

Los vecinos enseñaron a este diario las diversas quejas de los desperfectos que se han ido presentando desde el inicio a Emvismesa. Así, asegura que se sintieron "esquivados" por parte de los técnicos y los políticos quienes según indican "no presionaban a la empresa constructora para subsanar los defectos que en gran parte se encuentran en las zonas comunes". Incluso, lamentan que en ocasiones se les responsabilizara a los propios vecinos del cuidado y mantenimiento del mismo.

Humedades
Entre otros de los problemas que han tenido se encuentra el de los bajantes. Y es que según explicaron los sumideros estaban mal instalados dejándolos fuera de los cajetines correspondientes y tapándolos con la gravilla de la cubierta para disimularlo. Esto provocó que la gravilla se colara por los bajantes y los agujereara, toda vez que cuando llovía las plantas de arriba salieran pronunciadas humedades en los techos y paredes.

Asimismo, las losas que cubren la pared interior y exterior del edificio en la cubierta, según los técnicos que hicieron el estudio técnico del edificio, no son las que contempla el proyecto, siendo de un material de muy baja calidad arcilloso. Esto tuvo como consecuencia que con "las inclemencias del tiempo al poco, se han ido deteriorando como los azucarillos en el café".

Las barandillas oxidadas con las que temen que los niños que jueguen en la zona se hagan daño o la falta de alumbrado público, son otro de los problemas, así como las bombas de agua con cuyo reparto entre los bloques ha hecho que algunos se queden sin bombas de reserva, por lo que temen a quedarse sin agua.

Grietas y fisuras
Los vecinos fueron señalando cada una de las fisuras y grietas que están en los portales y en la propias zonas comunes del edificio, algo que les hace dudar a los residentes sobre si no existe realmente daños estructurales tras el terremoto, a pesar de que los técnicos de Emvismesa ya les han confirmado de que no son graves.

El presidente de la comunidad indicó que según les informó la Ciudad sería entre enero y principios de febrero cuando se iniciarían las obras, sin embargo, a mediados casi de febrero aún no han empezado por lo que este lunes volverán ha solicitar información a Emvismesa.

Loading

Nerea de Tena Alvarez

Más información

Scroll al inicio

¿Todavía no eres Premium?

Disfruta de todas
las ventajas de ser
Premium por 1€