La U.D. Melilla volverá a disputar hoy domingo(12’00 Horas)) en Lepe, ante el C.D. San Roque, una nueva final, debido a su acuciante situación en la clasificación general, en la antepenúltima posición y a 6 puntos de la zona de la salvación. El encuentro también es importantísimo para los onubenses, que reciben a los melillenses tras una dinámica negativa de tres derrotas consecutivas que les ha colocado en una situación comprometida, en la zona que marca la promoción del descenso.
Los melillenses son conscientes de la trascendencia del encuentro, pues todo lo que no sea ganar le alejaría, más aún, de la salvación. Precisamente, el rival al que se enfrentan esta mañana le supera en 5 puntos y ocupa la decimoséptima posición.
Carlos Granero, entrenador de la U.D. Melilla, resaltó que para poder ganar el primer partido a domicilio hay que mantener el orden y hacer las cosas bien, tal como sucedió en Marbella. «Hemos estado alguna vez cerca de ganar fuera, pero para conseguirlo debe ser desde la normalidad, intentando hacer las cosas bien. No puede ser desde la urgencia, la presión y desde esa absoluta necesidad. Los partidos nunca se ganan así, sino haciendo las cosas bien desde el principio, estando centrados, sabiendo lo que hay que hacer en la zona defensiva y ofensiva, haciendo daño en las acciones a balón parado», avanzó.
«Los partidos, a veces, se ganan cuando menos te lo esperas y lo debemos ponerle argumentos al partido. Si vamos obcecados y con mucho caos a por la victoria, ésta no va a llegar jamás», afirmó el entrenador de la U.D. Melilla.
El entrenador de la U.D. Melilla consideró que, si un equipo no es capaz de ganar un partido fuera de casa en todo el año, está condenado. «Esa es la auténtica realidad, pero cómo podemos sumar los tres puntos, desde el buen trabajo, ser competitivos y plantar cara a un equipo que está casi en la misma situación que nosotros».
Por otro lado, Granero es consciente de que su equipo tendrá que luchar contra todos los elementos en Lepe, con un público entregado a su equipo en el Campo Viejo, de reducidas dimensiones. «Me viene muy bien es frase que dice, tu motivación es mi gasolina, pero si cualquier jugador del Melilla no está motivado para afrontar esto, estamos muertos. Esta motivación debemos utilizarla y también manejarla a nuestro favor».
