Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.
Logo de Melilla hoy

No ganamos para sustos

melillahoy.cibeles.net fotos 1492 ed

Los expertos dicen que estas réplicas son normales, pero aún así, hay muchos que piensan que como esto siga así, no ganaremos para sustos El artículo publicado ayer en MELILL HOY parecía premonitorio de lo que podía suceder este lunes. Así, tanto en portada como interior, se informaba de que desde hacía un mes, la tierra no ha dejado de temblar ni un solo día en el Mar de Alborán. Así se detallaba que el Instituto Geográfico Nacional (IGN) había registrado en sus estadísticas casi 1.500 terremotos en esta zona desde que el 21 de enero se notó en Melilla el primer terremoto perceptible de la serie sísmica que arrancó mucho antes, el 12 de diciembre de 2015. Este periódico contabilizó, a partir de los datos publicados en la web del IGN, 1.483 seísmos desde el 21 de enero. De ellos, casi una quinta parte se acumularon el 25 de enero, el día del terremoto principal de 6.3 grados, que sacó a miles de melillenses de sus camas a las 5.22 horas de la madrugada.

Todo este cúmulo de datos parecía que daba una idea de lo que se podía avecinar y así ocurrió durante la madrugada del domingo al lunes, cerca de las cinco menos cuarto, cuando se produjo una sacudida de 5.1 grados en la escala Richter que ha tenido lugar esta madrugada con epicentro al sur del Mar de Alborán.

El seísmo de este lunes, que ha despertado a muchos melillenses cuando a las 04.46 horas tuvo lugar el fuerte temblor, que provocó que el movimiento de camas, lámparas e incluso algunos muebles, por fortuna tampoco provocó daños personales. Únicamente se contabilizaron algunos, muy escasos, casos de ansiedad o ataque de nervios que fueron atendidos en el Hospital Comarcal.

Entre los daños materiales, estuvo la caída de algunos cascotes de determinados edificios, entre ellos el Casino Militar situado en plena Plaza de España, cuyos algunos elementos ornamentales de su fachada cedieron durante el seísmo.

Tras el temblor y sus posteriores réplicas –más de diez en las horas posteriores–, algunos ciudadanos abandonaron su hogar con lo puesto –en pijama y zapatillas muchos de ellos– para aguardar en la calle a que la situación se tranquilizara e incluso, como ocurrió el pasado 25 de enero, hubo quienes se fueron a los Pinos, ante el convencimiento de que en esta parte alta de la ciudad estarían más salvaguardados.

Asimismo, la Ciudad Autónoma de Melilla tuvo que realojar a dos familias cuyas viviendas se han visto afectadas por el temblor, en concreto en la Calle General Prim, en un edificio que ya estaba afectado por el seísmo de 6.3 grados ocurrido hace ahora cuatro semanas, en concreto el 25 de enero, y que con el temblor de este lunes se ha agravado.

Los expertos dicen que estas réplicas son normales, pero aún así, hay muchos que piensan que como esto siga así, no ganaremos para sustos.

Loading

Más información

Scroll al inicio

¿Todavía no eres Premium?

Disfruta de todas
las ventajas de ser
Premium por 1€