CCOO iniciaba una campaña de recogida de firmas con el objeto de presionar al Insalud para que subvencionase el traslado a Melilla de los melillenses fallecidos en la Península, debido al elevado coste que suponía para las familias. La captación de apoyo a esta iniciativa se había establecido en todos los centros de trabajo, después de que Insalud "haya hecho oídos sordos" a la propuesta. La central sindical hacía un llamamiento ciudadano para que colaboraran.
Los melillenses podían solicitar el nuevo DNI, con un diseño similar a las tarjetas de crédito y que presentaba la supresión de la huella dactilar y la inclusión del NIF.
