Los disturbios han seguido por sexta madrugada consecutiva en algunos barrios periféricos después de que se iniciaran estas protestas la madrugada del lunes en el barrio del Tiro Nacional. Anoche les tocó a Cabrerizas, Las Palmeras y Rastro fundamentalmente, y también a Tiro Nacioal, con la quema de contenedores, el lanzamiento de piedras -contra las FyCSE y la COA- y otras acciones de este tipo, al parecer para reivindicar un puesto de trabajo. Parece que no hay tregua. Después de que las primeras detenciones de presuntos autores en los disturbios hubieran reducido los incidentes que se originaron la madrugada del lunes en el barrio del Tiro Nacional y que posteriormente se trasladaron a La Cañada, Averroes y Las Palmeras, anoche los sucesos volvieron con fuerza y esta vez en la carretera México del barrio Cabrerizas, en la carretera de Hidum -frente a Las Palmeras-, en el Rastro, en concreto en la Plaza Martínez Campos y nuevamente en el Tiro Nacional.
Se sucedió la quema de contenedores, que llegaron a cruzar en la carretera para impedir el paso de vehículos; el apedreamiento a gentes y bomberos y la formación de barricadas, así como los cortes de luz del alumbrado público. Según ha podido saber MELILLA HOY, de los disturbios de anoche hay al menos un detenido, en concreto en los sucesos de la carretera México, pero esta lista podría aumentar.
COA rota
Por otro lado, la COA volvió ayer a ser víctima de un nuevo apedreamiento. Si el jueves fue a su paso por Tiro Nacional, ayer le tocó a la línea que cubre Torres Quevedo con Mariguari, cuyo autobús recibió sobre las 19.00 horas una piedra que rompió una de las lunas y no dio a la conductora "de verdadero milagro" apuntaron desde la cooperativa, que destacaron que el vehículo estaba ocupado en esos momentos por varios pasajeros.
La llegada de la calma a los barrios periféricos parece que se resiste.
