UPYD concurrirá en Melilla a las elecciones generales del 26 de junio con sus siglas y candidatos que se encuentran en estos momentos en un proceso de primarias, tal y como está establecido en sus estatutos. Además, UPYD necesita aportar los avales exigidos -unos 45.000 a nivel nacional- en la Ley Electoral, algo que en la ciudad “es un trámite que está prácticamente superado”.
Emilio Guerra, coordinador melillense de la formación magenta, considera que UPYD tiene “espacio político suficiente para tratar de convencer a la ciudadanía de sus propuestas y de la necesidad de una formación como la suya que destaca en la defensa de la integridad territorial de España, así como la igualdad y la cohesión de todos los españoles, con independencia de dónde residan”.
Acuerdo PSOE-CPM
El dirigente de UPYD se refirió también al reciente pacto entre Coalición por Melilla y PSOE para las elecciones del 26J. En primer lugar, Guerra, dijo que “es una oportunidad y una obligación presentar nuevas fórmulas ante el electorado después del fracaso del 20D”.
Según su criterio, CpM “ha dado un paso adelante presentándose a unas elecciones generales que normalmente descartaba” y además, matizó, “han sido significativamente generosos aceptando ir bajo las siglas de otro partido, cuando son ellos la segunda fuerza política de la ciudad”.
Sin embargo, Guerra cree que “ha sido un error, que ya tiene antecedentes y pagaron caro en las elecciones del 2009, dejar fuera del pacto a distintas fuerzas minoritarias de la ciudad, puesto que el voto a las mismas puede otorgar la victoria a unos u otros en lo que se prevé un escenario ajustado”. El llamamiento a la suma, después de establecido el acuerdo y repartido los candidatos entre CpM y PSOE, es para el upedista “un mensaje más metafórico que real y sincero. Es un simple postureo cara a la galería”.
El caso es que con el pacto CpM-PSOE, el escenario electoral cambia en Melilla “como de la noche a la mañana”, porque “se esfumó la previsión del PP de tener unas elecciones tranquilas y ganadas sin bajarse del autobús”.
