El delegado del Gobierno en Melilla, Abdelmalik El Barkani, aseguró ayer que el terrorismo yihadista “no es tan importante” en la ciudad como otros lugares donde se han dado atentados y numerosas operaciones antiterroristas, aun cuando Melilla ha despertado interés internacional por este ámbito. Durante la clausura del curso formativo sobre terrorismo yihadista organizado por los sindicatos CEP y CSI-F y la Asociación Española de Guardias Civiles (AEGC), El Barkani puntualizó que “no hay ninguna región del mundo libre de que pueda haber un problema” relacionado con el terrorismo yihadista.
Sin embargo, opinó que el problema en Melilla “no es tan importante” como pudiera serlo en Bélgica, Francia, Barcelona o Madrid, donde “ha habido problemas” con el terrorismo yihadista, y atribuyó este hecho a la riqueza intercultural y el “conocimiento mutuo” que hay entre las diferentes comunidades religiosas que conviven en la ciudad autónoma.
En cualquier caso, aclaró que eso no quiere decir que la ciudad “esté libre” de sufrir un problema en este sentido y cree que es importante que se aborde el terrorismo yihadista en Melilla con cursos como el clausurado ayer.
También destacó el interés internacional que ha despertado la ciudad entre medios de comunicación e investigadores que han querido “conocer la realidad de Melilla”.
“Nuestros brazos están abiertos para quienes quieran conocer nuestra realidad y opinar desde el conocimiento y la cercanía, y no desde la lejanía, el desconocimiento y a veces, la impertinencia”, dijo El Barkani, en cuya opinión el hecho de conocer la realidad de Melilla ayuda a tomar decisiones justas”.
“Lo contrario hace que oigamos de vez en cuando confundir términos de yihadismo, Islam, de creencias, y las dudas siempre hacen un daño enorme”, siguió diciendo El Barkani, que consideró que Melilla no pretende extrapolar su modelo de sociedad, sino que se conozca más.
Asimismo, opinó que no se debe bajar la alerta antiterrorista, que en estos momentos se encuentra en un nivel 4 reforzado, lo que significa que las instituciones deben dirigirse a los ciudadanos para ofrecerles “tranquilidad dentro de la situación de alerta en que hay que estar para evitar cualquier problema”.
