La Audiencia Provincial responde a los argumentos de la Asociación Coordinadora de Barrios, pero sirve igualmente para quienes han ayudado a poner en duda la legalidad de la actuación de la Guardia Civil a los ojos de todo el mundo durante todo este tiempo. Muchos son los que han aportado su granito de arena en este sentido, no sólo oenegés, sino también partidos políticos de la oposición, responsables europeos e incluso instancias judiciales que admitieron denuncias que nunca deberían haber tenido en cuenta El auto de la Audiencia Provincial, del que ayer dimos cuenta ampliamente en este Diario, es un bofetón sin manos a quienes se han limitado en estos últimos años a criticar la actuación contra la enorme presión migratoria que ha sufrido nuestra frontera, y que sigue existiendo aunque sea en menor grado, tal y como ayer se pudo comprobar con un intento de salto a la valla de 120 subsaharianos. La Audiencia Provincial responde a los argumentos de la Asociación Coordinadora de Barrios, pero sirve igualmente para quienes han ayudado a poner en duda la legalidad de la actuación de la Guardia Civil a los ojos de todo el mundo durante todo este tiempo. Muchos son los que han aportado su granito de arena en este sentido, no sólo oenegés, sino también partidos políticos de la oposición, responsables europeos e incluso instancias judiciales que admitieron denuncias que nunca deberían haber tenido en cuenta, dado de que no cumplían lo establecido por sus defectos de forma y sumían en la incertidumbre a los profesionales encargados de custodiar la frontera.
Este nuevo auto judicial de la Audiencia Provincial, el segundo en el mismo mes sobre la actuación de los 8 guardias civiles que estuvieron imputados por su actuación en la valla fronteriza, deja claro que los agentes hicieron uso de la fuerza de una manera «proporcionada y necesaria en cumplimiento del deber impuesto legalmente de la protección de la seguridad de las fronteras del Estado Español», y por ello no se les puede atribuir un delito derivado del uso de la fuerza, pues los agentes estaban llevando a cabo «un cumplimiento de un deber» y afrontando «acciones violentas» contra ellos por parte de algunos de los inmigrantes. Aquel día, los guardias civiles estaban en la valla «en el ejercicio de sus funciones», «integrados en una unidad policial a la que se había encomendado evitar el éxito de los asaltos masivos a la valla fronteriza de Melilla procedentes del Reino de Marruecos que pretendían entrar ilegalmente en territorio español», dado que los inmigrantes «no portaban la documentación administrativa necesaria» y con esta acción, «eludían los pasos fronterizos habilitados». En definitiva, la Audiencia señala que la intervención de los agentes «estuvo sujeta a los requisitos de legalidad, proporcionalidad y racionalidad», zanjando una sombra de duda que algunos, de manera interesada, han puesto no sobre estos 8 agentes, sino sobre el conjunto de la Guardia Civil, durante cerca de dos años.
Para llegar a esa conclusión, la Autoridad ha tenido en cuenta una serie de factores que han sido pasados por alto de manera intencionada por asociaciones, activistas y políticos que, de manera lamentable, han utilizado este tema de manera partidista. Entre ellos, Coalición por Melilla y Equo, que incluso presentaron una denuncia ante el juzgado por la devolución de los inmigrantes kamikazes, alineándose con varias oenegés que, como dice en dos autos diferentes, presentaron sin empacho pruebas manipuladas ante la autoridad judicial. Pero también el PSOE, que en este tema ha jugado de manera lamentable a dos bandas, haciendo en la oposición lo contrario de lo que hizo en el Gobierno, que es lo mismo que se estaba haciendo ahora aunque fuera del color político de su adversario político. Sería curioso conocer qué piensa el PSOE de este auto de la Audiencia, que deja en evidencia su postura respecto a la derogación de los rechazos en frontera y las peticiones oportunistas de protocolos de actuación. ¿O en el PSOE aún no tienen preparado el argumentario para salir algo airosos de esta mala jugada que han realizado por politizar con un tema donde no cabía el partidismo?
