El Gobierno local justificó ayer el apoyo que está prestando al Club Melilla Baloncesto en su objetivo de ascender a la ACB porque “ha trascendido lo deportivo” para convertirse en “un proyecto de ciudad”. “Todo el mundo quería que Melilla esté en la ACB”, apuntó el presidente de la Ciudad Autónoma, Juan José Imbroda, que ayer por la tarde mantuvo una reunión sobre este asunto con el consejero de Deportes, Antonio Miranda, y el presidente del club, Jaime Auday.
En dicho encuentro, avanzó Imbroda por la mañana, estaba previsto que Gobierno y club hablaran de cómo se están desarrollando las gestiones para lograr el ascenso, un reto en el que “la colaboración es importante porque es un proyecto de ciudad”.
Además, “se ha mordido este hueso y ya no se puede soltar”, apuntó Imbroda tras insistir en los beneficios que reportará a Melilla que el club esté en la máxima categoría del baloncesto nacional en cuestión de imagen. “Nos interesa a todos”, resumió.
En este sentido, señaló dos problemas añadidos en las gestiones, y es que la Federación Española de Baloncesto, que tiene una voz importante en este asunto, está sin presidente y pendiente de unas elecciones. El otro es que el Gobierno está en funciones. Confió en que siga Íñigo Méndez de Vigo como ministro de Deportes para tratar de derogar el canon con medidas legales impulsadas por el Parlamento.
En cualquier caso, Imbroda consideró que, aunque el Club Melilla Baloncesto tenga su plaza guardada en la ACB durante un año, eso no quiere decir que el equipo no sea competitivo esta próxima temporada para que la afición siga “volcada”.
