El Gobierno de la Ciudad dejaba de manifiesto que sería el interés general el que decidiría si se daba permiso o no para que una conocida multinacional abriera un gran centro comercial en Melilla. Los comerciantes melillenses se oponían frontalmente a tal posibilidad y de hecho durante la feria del año anterior se vivieron movilizaciones de protesta con cierre de comercios incluido.
Melilla volvía a ocupar la portada de los medios nacionales y extranjeros con el tema de la inmigración. Se supo entonces que el Gobierno central había trasladado en avión y narcotizado, a distintos países africanos, a los inmigrantes que se habían manifestado en la ciudad en demanda de un permiso de residencia.
Se celebraba el I encuentro de poetas Amazight.