El salón de actos de la Uned acogió anoche el primer festival de verano de la Escuela de Flamenco dependiente del Instituto de las Culturas, en el que los alumnos vinieron a demostrar no sólo el arte que hay en Melilla, sino lo mucho que han aprendido a lo largo del curso. En el escenario, mano a mano, alumnos y profesores ofrecieron un espectáculo digno de repetir y del que disfrutó el numerosísimo público asistente. Además la noche contó con la intervención del maestro, el cantaor Pepe Pozo y de la Escuela de Música y Danza.