Dos de los mejores narradores del mundo -Roald Dahl y Steven Spielberg- se unen para dar vida al cuento del primero en una película dirigida por el segundo, que cuenta la historia de una niña y el gigante que le enseña las maravillas y peligros del País de los Gigantes. Cuando todos duermen, las cosas oscuras salen de su escondite y tienen el mundo para ellas solas. Eso es lo que le han contado a Sofía (Ruby Barnhill), una niña huérfana de 10 años. Mientras todas las demás niñas del orfanato duermen, Sofía se arriesga a salir de su cama, asomarse a la ventana y ver qué aspecto tiene el mundo a la hora de las brujas, todo ello rompiendo una de las normas de la señora Clonker. De la oscuridad sale algo largo y alto, un gigante (Mark Rylance) que agarra a Sofía y se la lleva su lejano hogar. Afortunadamente para Sofía, el gigante no se parece en nada al resto de los habitantes del País de los Gigantes. Con una altura de más de 7 metros, enormes orejas y un gran olfato, es tan bobo como tierno y pasa la mayor parte de su tiempo solo. Sus hermanos son el doble de grandes y el doble de terroríficos, y se conoce que han comido humanos (o guisantes, como ellos les llaman), pero este gigante es vegetariano y se alimenta con una verdura asquerosa que llama pepinasco.
A su llegada al País de los Gigantes, Sofía tiene miedo y un montón de preguntas. El gigante atrapa sueños y los envía a los niños, enseña a la niña todo acerca de la magia y el misterio de los sueños. Habiendo estado cada uno en su mundo, surge una amistad. Pero la presencia de Sofía en el País de los Gigantes ha llamado la atención de otros gigantes, que se han vuelto cada vez más molestos. Sofía y su nuevo amigo gigante deciden ir a Londres para ver a la reina (Penelope Wilton) y advertirla de la precaria situación, pero primero han de convencerla de que los gigantes existen. Juntos, idean un plan para deshacerse de los gigantes malos para siempre.
Mi amigo el gigante es la primera adaptación cinematográfica de este cuento infantil de Roald Dahl, acerca de la magia de los sueños y la extraordinaria amistad entre una niña y un gran gigante amigable.
La película está dirigida por Steven Spielberg, conocido en el mundo del espectáculo como «El Rey Midas de Hollywood». Spielberg ha sido nominado al Oscar en la categoría de Mejor Director por siete de sus películas, habiéndolo obtenido con «La lista de Schindler (1993) y «Salvar al soldado Ryan» (1998). Tres de sus películas: «Tiburón»; «E.T.: El extraterrestre» y «Parque jurásico», lograron récord de taquilla y se convirtieron en las de mayor recaudación en su momento.
El equipo creativo está compuesto por algunos de los colaboradores de toda la vida de Steven Spielberg, entre ellos el director de fotografía ganador de dos Oscars Janusz Kaminski, el diseñador de producción ganador de dos Oscars Rick Carter, el editor ganador de tres Oscars Michael Kahn, ACE y la diseñadora de vestuario nominada al Oscar Joanna Johnston. Además de la colaboración del compositor ganador de cinco Oscars John Williams que, con esta película, suma veinticuatro partituras para películas dirigidas por Spielberg, también ha contado con la guionista nominada al Oscar Melissa Mathison.
Junto a ellos están el ganador de dos Oscars Robert Stromberg como diseñador de producción y el ganador de cuatro Oscars Joe Letteri de Weta Digital, la compañía de efectos visuales fundada por Peter Jackson, como supervisor jefe de efectos visuales.
Durante más de cuarenta años, Steven Spielberg ha compartido sus historias con públicos en todo el mundo, incorporando un amplio abanico de personajes extraordinarios a la cultura, llevando a generaciones a mundos que son a la vez fascinantes, aterradores, encantadores y reales. El cuento de Roald Dahl parecía estar en perfecta sintonía con la obra del director pero, aunque Sofía y su amigo el gigante parecían destinados a encontrarse con el mundo de Spielberg, han pasado décadas entre la publicación del libro y el comienzo del rodaje de la película.
«El Gran Gigante Bonachón» se publicó por primera vez en 1982, el mismo año que llegaba a las pantallas la película de Spielberg «E.T. El extraterrestre». Ambas historias hablan de una amistad inusual y transformadora,.
Roald Dahl (Llandaff, Cardiff, Gales 1916 – Oxford 1990) es uno de los narradores más creativos del mundo, supo entender la vida interior de los niños y crear personajes con los que se pueden identificar e historias que les enganchan. Su habilidad para combinar lo fantástico con lo aterrador y situar en sus relatos a los niños como héroes y a los adultos como villanos, no tiene parangón en el mundo literario. Mientras que los argumentos de Dahl aceptan que la vida puede ser difícil y a veces aterradora, que hay cosas buenas y malas, nunca es condescendiente con sus lectores. Entre sus obras más destacadas llevadas al cine están «Charlie y la fábrica de chocolate», «James y el melocotón gigante» y «Matilda».
Dahl también escribió cuentos macabros para adultos, cargados de humor negro y final con sorpresa, muchos de ellos publicados en revistas como Harper’s o Playboy. En los años 60 escribió guiones cinematográficos, entre otros «James Bond. Solo se vive dos veces» y «Chity Chity Bang Bang», ambos adaptaciones de novelas de Ian Fleming, y el de su propio trabajo «Willy Wonka y la fábrica de chocolate». También escribió poesía para niños y novela para adultos.
Dahl creaba historias para contarlas a sus hijos y nietos, pero siempre se resistía a escribirlas. Afortunadamente, acabó compartiéndolas con el mundo, algo que nos ha beneficiado a todos.
«El Gran Gigante Bonachón» se ha publicado, hasta la fecha, en más de cuarenta idiomas. De todas sus historias era la favorita de Dahl. Cuando el autor falleció, los productores hablaron con su viuda sobre lo importante que ese libro fue para Dahl y si hacer una película era una idea realista. Lo primero que se necesitaba era un guión para un largometraje, alguien con una habilidad especial e instinto para historias infantiles, por eso recurrieron a su amiga y colega Melissa Mathison, dotada de una particular sensibilidad.
Mathison visitó Gipsy House, la casa de Dahl en Buckinghamshire (Reino Unido), en varias ocasiones, y tuvo acceso a la biblioteca y estudio del autor. Exploró la vida y la obra del escritor y navegó su propio camino hacia el paisaje salvaje, gracioso y rico de su imaginación, lo cual le dio la base para capturar el espíritu de la aventura de Dahl. Para Mathison ha sido de suma importancia mantenerse fiel a la voz de Dahl, ser consistente con el ritmo y lenguaje del autor, así como la interacción entre los personajes.
Los nueve gigantes malvados hermanos de Bonachón son: Zampamofletes (Jemaine Clement), mide casi dieciséis metros; Bebesangres (Bill Hader), el cerebro de la pandilla; Machucahombres (Adam Godley), el más lento y flaco; Tragamollejas (Chris Gibbs), el más bajito de todos, no llega a los doce metros de altura; Revientahuesos (Michael David Adamthwaite), el más joven del grupo; Picacarnes (Paul Moniz de Sa), es el bromista de la pandilla y le encanta cazar niños; Estrujaniños (Jonathan Holmes), el mejor amigo de Picacarnes; Aplastadamas (Ólafur Ólafsson), el más estiloso del grupo, y El Pequeño Carnicero (Daniel Bacon), es cojo como resultado de una pelea con Picacarnes,
De hacer de todos ellos una tribu cohesionada se ha encargado Terry Notary, que anteriormente había trabajado con Cirque du Soleil como coreógrafo de movimiento.
Para llegar a la mejor manera de filmar acción real y elementos de captura de movimiento simultáneamente a lo largo de la película y tenerlos integrados a la perfección, los cineastas crearon una versión pre-visualizada de toda la película antes de que comenzara el rodaje.
En vez de capturar los esqueletos de los intérpretres por separado y después mezclarlo con actuaciones humanas y digitales en posproducción, contaron con el apoyo de Joe Letteri de Weta Digital y su equipo de artistas en un proceso completamente nuevo, lo más cercano posible al rodaje de acción real. El resultado, un híbrido que mezcla acción real y técnicas de captura de movimiento para dar vida a los personajes de la historia, todo en sets reales que se construyeron específicamente para le película. Spielberg también se ha apoyado en Simulcam, una idea creada por James Cameron en «Avatar» que consiste en combinar actores y sets del mundo real con actores y sets generados por ordenador. La principal complicación fue acomodar tres mundos de diferente tamaño. Para escenas con Sofía y su amigo gigante en el mismo plano, se construyeron unos andamios de la altura de dos pisos en los que se puso una cámara flotando enfrente de la cara de Mark Rylance para que hubiera contacto visual e intercambio real. Los sets de captura de movimiento, también se acomodaron al diferente tamaño de los actores.
La fotografía principal de Mi amigo el gigante comenzó a las afueras de Vancouver, en un viejo almacén en el que una serie de espacios enormes y oscuros se convirtieron en los escenarios donde se construyeron los sets. El diseñador de producción Rick Carter y su equipo crearon ambientes y lugares que evocan algo, no solo de la historia y los personajes, sino de los temas de la película, hicieron mundos dentro de mundos donde Spielberg pudo desarrollar su visión para la historia de Dahl. Entre otros sets, destaca el del Palacio de Buckinghan, con altos techos y tonos rojos y dorados, un pintoresco hogar escandinavo o el orfanato oscuro y olvidado en una calle empedrada de Londres. Igual de impresionante son todos los adornos mágicos e inventivos de cada set, algunos en dos y, a veces, tres tamaños diferentes.
Si se hubiera hecho Mi amigo el gigante cuando se publicó el libro, en 1982, hubiera sido una película completamente distinta. La tecnología de captura y fotografía digital actuales (y la habilidad del director y su equipo), han permitido crear una relación especial entre la joven huérfana Sofía y el gran amistoso gigante de la manera que se merecía. Gran parte de este extraordinario trabajo se debe al director de fotografía Janusz Kaminski.
Una película para entretener a todos los públicos, a los niños por su relato y a los adultos por su tecnología, entre otras cosas. Una historia truculenta, casi terrorífica, convertida en casi comedia, con muchas notas de humor y aventura.
