Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.
Logo de Melilla hoy

Y a pesar del levante y el fuerte oleaje la estrella de los mares bendijo la dársena melillense

melillahoy.cibeles.net fotos 1640  SGG2470
(Autor: Guerrero)

El fuerte oleaje impidió que la Virgen del Carmen pudiera cumplir con la tradición de ser portada sobre una barca con la que recorrer la dársena melillense y desde la que arrojar una corona de laurel en recuerdo de todos aquellos que perdieron la vida en el mar. Aún así, por dos veces la estrella de los mares entró en el agua, primero sobre los hombres de la A.V. Hipódromo y después, por los hombres de Corea.
La tarde se inició con la salida de la imagen de la Virgen del Carmen portada por los hombres de la Asociación de Vecinos Hipódromo, custodiada por una escuadra de gastadores de la cuatro veces centenaria Compañía de Mar y la Banda de Cornetas y Tambores de la Cofradía del Nazareno. La comitiva se dirigió a la parroquia de San Agustín donde se ofició una misa de acción de gracias.

Procesión
Después, la virgen, arropada por hombres, mujeres y niños, se dirigió hacia el mar, no sin antes hacer un alto a la altura de la Plaza del Callao donde la viceconsejera del Mayor, Carmina San Martín, en nombre de los organizadores, entregó un ramo de flores a Carmen Leal, viuda de Francisco Gil Castro, quien en 1986 no dudó en poner en riesgo su vida, como así ocurrió, para rescatar a un joven de morir ahogado. La imagen de la virgen alzada al cielo, por los brazos de los portadores y los aplausos y vivas del público, no hizo sino imprimir mayor emoción al abrazo de agradecimiento que, en nombre de Melilla, diera Carmina San Martín a una orgullosa Carmen Leal. En ese momento varios padres ofrecieron a sus recién nacidos a la patrona del mar.

Con la escuadra de la Compañía de Mar abriendo paso, la comitiva se dirigió a un paseo marítimo tomado por decena de melillenses de todas las edades, mientras los tambores y cornetas de la banda acompañaba con sus acordes, el cadencioso paseo del trono mariano. Lentamente los hombres se introdujeron en el mar, soportando con la fuerza de sus brazos el pequeño trono de la virgen, evitando así que el fuerte oleaje pudiera derribarlos. Aún así, no se ahogaron las voces de los portadores dando vivas a la patrona y llamándola guapa. Dos hombres se encargaron de lanzar la corona de laureles al mar, cumpliendo la tradición de homenaje a todos aquellos que han perdido la vida en la oscuridad del mar.

Corea
A su regreso a la playa, los vecinos del Hipódromo portaron la Virgen a lo largo de un paseo marítimo tomado por melillenses de todas las edades hasta llegar a la altura de la playa de los Cárabos donde un grupo de hombres de Corea formó un pasillo con el que recibir, siempre con vivas a la madre de Dios para realizar el relevo. Ellos también regresaron a la playa y se introdujeron en el agua, llevando sobre sus hombros a la patrona. Seguidamente regresaron a tierra para continuar la procesión hasta el Bar Aragón, donde, como ocurre cada año, los propietarios, realizaron una ofrenda de flores de la Virgen y donde también, varias familias, ofrecieron a sus hijos para recibir la protección de María.

En ese momento se produjo otro de los grandes momentos de la procesión de la Virgen del Carmen en Melilla y es el relevo de las mujeres de Corea bajo las andas que portan a la patrona. Ellas la condujeron hasta el local social en el que se celebró un pequeño encuentro entre la imagen procesionada y la que se guarda en este local del Industrial. La Virgen fue conducida entonces hasta la Asociación de Vecinos del Hipódromo hasta el próximo año.

Sobre las diez y media de la noche dio comienzo entonces la verbena popular de Corea que contó con la animación musical del grupo Sonikete. Hoy, a las dos de la tarde, se cierran las festividades con una gran paella para trescientos invitados.

Loading

Jesús Andújar

Más información

Scroll al inicio

¿Todavía no eres Premium?

Disfruta de todas
las ventajas de ser
Premium por 1€