La asociación ‘Oxígeno Laboratorio Cultural’ se ha propuesto acercar a los melillenses a los barrios “menos turísticos” de la ciudad, ya que también forman una parte importante de la historia y el presente de Melilla.
Esta semana, un grupo de personas visitó de la mano de la entidad sociocultural zonas como El Rastro o el Barrio Hebreo, así como sus alrededores. “Nuestro objetivo es dinamizar estos espacios y que la gente los conozca. Para ello contamos con el guía José Oña, que nos va explicando parte de la historia de las zonas”, explicó a este periódico Francesco B. Bondanini, responsable de la entidad.
Esta era la séptima visita que organizaba la organización, que ya ha recorrido otros enclaves de la ciudad como El Mantelete, el fuerte de Victoria Grande o Cabrerizas. “Suelen apuntarse una treintena de personas”, afirmó el responsable de la asociación, ya que las excursiones son gratuitas.