Hace unos días, la Consejería de Seguridad Ciudadana decidió “facilitar la comprensión” de las normas de las playas publicándolas en su perfil de Facebook. De esta manera, pretendía recordar que muchas de las cosas que se ven a diario en nuestras playas están en realidad prohibidas. “Está en manos de todos poder disfrutar de los entornos comunes de manera segura, con educación y respeto hacia nuestros vecinos”, recordó este departamento.
Por ejemplo, está prohibido “la circulación o establecimiento de vehículos de cualquier tipo, excepto los vehículos de urgencias, seguridad y servicios públicos de la ciudad”; establecer campamentos y acampadas, como tiendas de campaña, toldos, faldones y todo tipo de montajes; los vertidos o residuos (líquidos, orgánicos, colillas, etc…) a las playas o al mar de cualquier sustancia que pueda poner en peligro la salud pública, hacer fuego, cocinar o asar al aire libre; todo tipo de juegos que puedan molestar a los usuarios (pelotas, fútbol, petanca, tenis, etc…), a excepción de las instalaciones deportivas autorizadas por la Ciudad Autónoma, transitar con animales (caballos, perros o cualquier clase de animal) por la playa y lugares públicos de baño y provocar o mantener ruidos (aparatos de música, radio) de una intensidad tal que pueda molestar a los usuarios.
También recuerda que “los espigones existentes en las playas no son plataformas de paseo o zonas de baño” y que “la pesca deportiva y recreativa solo podrá realizarse en los lugares habilitados para tal fin”. Además, “las embarcaciones de recreo no podrán introducirse en las zonas habilitadas por el balizamiento de playas para el baño” y “deberá respetarse el buen uso de las sombrillas, quedando prohibido volcarlas, moverlas de sitio o utilizar sombrillas volcadas o con toldos”.
Asimismo, pide que “en caso de duda o emergencia, cumplir todas las indicaciones y consejos de nuestros socorristas”.
