La Policía Local ha detenido en Melilla a un marroquí de 60 años de edad contra el que pesaba una orden de búsqueda y detención por un presunto delito de homicidio en grado de tentativa tras agredir presuntamente en 2013 a otro individuo con una navaja en el cuello, tórax, brazos, manos y piernas, acción por la que estaba siendo buscado para ser juzgado. La Consejería de Seguridad Ciudadana ha informado que la Policía Local ha detenido a un individuo que responde al nombre de A.N., 60 años de edad y de nacionalidad marroquí, en la calle Cabo Cañón Antonio Mesa confluencia con Paseo Marítimo, en la tarde del martes 16 de agosto 2016, por reclamación judicial.
Según su portavoz, los hechos se produjeron cuando una patrulla de Policía Local fue requerida por la Sala del 092, para que se personara en el lugar antes indicado, ya que se encontraba una persona adulta en estado de embriaguez y orinando en la vía pública.
Homicidio en grado de tentativa
Una vez en el lugar y entrevistados los agentes de servicio con el individuo en cuestión, procedieron a su identificación. Pudieron comprobar a través de los servicios informáticos de la Policía, que sobre él pesaba una "Orden de búsqueda y detención" ante el Juzgado de lo Penal nº 2 de Melilla, por un presunto delito de homicidio en grado de tentativa.
La Consejería que dirige Isidoro González ha indicado que los hechos se remontan al año 2013, donde fue detenido en la Playa de la Hípica por el Grupo de Prevención y Reacción (G.P.R.) de la Policía Local, tras presuntamente agredir a otro individuo con una navaja ("que le fue intervenida" aseveran), individuo que tuvo que ser asistido de múltiples lesiones en el cuello, tórax, brazos, manos y piernas, que fueron calificadas de graves y con ensañamiento, por lo que se le consideró como autor de un presunto delito de homicidio en grado de tentativa.
El portavoz policial ha indicado que una vez comprobada la validez de dicha reclamación judicial, la Policía Local procedió la detención de A.N., y a su posterior traslado hasta la Jefatura Superior de Policía, donde quedó ingresado en los calabozos, a la espera de su puesta a disposición de la Autoridad Judicial.
