La Policía Nacional ha detenido en la Estación Marítimo de Melilla a un hombre de 54 años que pretendía viajar en el ferry de Motril (Granada) con 200 gramos de hachís ocultos en su equipaje y a quien delataron sus nervios a medida que se acercaba al control documental policial, según informó ayer un portavoz. Los hechos ocurrieron de madrugada, a las 2.45 horas del sábado 20 de agosto, cuando dos policías adscritos a la Brigada Móvil que se encontraban de servicio en la Estación Marítima sospecharon de la actitud de uno de los viajeros de la cola de pasajeros con destino a Motril. A medida que este individuo se acercaba al control documental se mostraba más nervioso e inquieto.
Al objeto de proceder al registro de su persona y pertenencias y verificar si portaba o no sustancias estupefacientes, los agentes invitaron al viajero a acompañarles a dependencias destinadas al efecto. Nada más abrir el equipaje se pudo percibir un fuerte olor a especias y hachís procedente de un bolsillo de la maleta. Preguntado por los policías, el viajero manifestó voluntariamente que llevaba hachís para costearse el viaje con su venta. Los agentes registraron su persona y pertenencias, encontrando tres trozos de hachís con un peso aproximado de 200 gramos. El detenido, un marroquí de 54 años de edad, fue trasladado a los calabozos de la Jefatura Superior de Policía, siendo puesto a disposición del Juzgado de Instrucción Número Dos, en funciones de guardia, durante la mañana del sábado.
