Son ya tres días de pretemporada para los azulinos. A pesar de la dureza que siempre supone esta fase para cualquier jugador, Arteaga explicó que las ganas de entrenar ya en Melilla y con sus nuevos compañeros siempre da un plus extra de energía. “Estoy muy contento e ilusionado de haber comenzado ya la pretemporada. En estos días he podido conocer a los nuevos compañeros, aunque a la gran mayoría ya los conocía de haber jugado contra ellos”. El recién estrenado jugador azulino recordó que, aunque las pretemporadas siempre suele ser la parte que más detestadas por los jugadores, es un trabajo importantísimo de cara a una temporada siempre exigente. “No se si la pretemporada le gustará a muchos jugadores porque los que nos gusta es competir, pero es algo que nos viene muy bien para una temporada muy dura que se presenta”.
Las dobles sesiones de trabajo físico son algo habitual en esta parte de la temporada y Arteaga explicó que, consciente de ello, siempre suele entrenar en verano para llegar a las mejores condiciones a las pretemporadas. “En las vacaciones siempre intento mantener el tono, porque sino después uno lo acusa. Siempre, en los primeros días, cuesta un poco, pero en líneas generales me encuentro bastante bien”.
Los melillenses acumulan ya cuatro sesiones, poco tiempo, pero suficiente para que el nuevo interior azulino vea ya mimbres de un equipo que puede dar muchas alegrías a la parroquia azulina. “Tenemos una gran plantilla y, con la suerte añadida de contar con un parte muy importante del bloque del año pasado, estoy convencido de que estaremos arriba”.
