Antes de que se celebrara la sesión fallida de investidura, la vicepresidenta del Gobierno en funciones, Soraya Sáenz de Santamaría, adelantó que el Ejecutivo “no obstaculizará” las medidas que puedan impulsar los partidos políticos para evitar que unas eventuales terceras elecciones generales tuvieran que celebrarse el día 25 de diciembre.
La vicepresidenta recordó que el Gobierno no puede aprobar proyectos de ley estando en funciones, pero reconoció que no obstaculizará ninguna iniciativa que pueda repercutir en “beneficios para los españoles”.