Joaquín Martínez, vendedor de la Once en la Plaza de las Victorias, en el Barrio de la Victoria, brindaba ayer con una botella de cava junto al director de la Once en Melilla, Carlos Gordillo. La ocasión no merecía menos y es que la Once reparte en la ciudad su premio más elevado hasta el momento, más de 9,2 millones de euros en premios gracias al sorteo del Cuponazo del viernes. El vendedor, que lleva 29 años en la casa, se mostró muy feliz por haber llevado algo de felicidad a los hogares de personas que más lo precisan. Señala que los agraciados son vecinos del barrio, personas que viven con estrecheces. Carlos Gordillo, director de la Once, agradeció a Melilla que "nos compra cada día", al tiempo que aseguró que era motivo de alegría que Joaquín Martínez haya contribuido a repartir más de nueve millones de euros en el barrio de la Victoria. "Estamos encantados de volver a cumplir los sueños de alguien y queremos seguir repartiendo ilusión. Estamos contentos por cumplir con una de nuestras pequeñas facetas, que es dar premios y repartir ilusión", aseguró. Incidió en que gracias a lo que se recauda a nivel nacional con la compra de los productos de la Once, la organización "puede repartir ilusión (premios) además de dar empleo y servicios a las personas con discapacidad, que es todo lo que hay detrás del cupón". La organización nacional de ciegos da empleo a más de ochenta mil personas.
Indicó Gordillo que es la primera vez que la Once reparte en Melilla este volumen económico en premios y es que se han vendido diez boletos, nueve dotados con 25.000 euros cada uno y el cuponazo de 9 millones de euros. Señaló que a partir del martes los agraciados pueden acercarse a la Once para retirar su premio, aunque el ingreso se realizará casi dos semanas después. Añadió que la Organización, cuando se produce un premio económico tan elevado, suele entregar a la persona agraciada un documento con recomendaciones sobre cómo gestionar el dinero.
Por su parte Joaquín Martínez, se declaró "encantado de haber dado el premio, porque es gente de Melilla, gente que necesita el dinero". Afirmó sentirse feliz de "haber dado ilusión" a los agraciados y aunque desconoce quiénes son los ganadores, sí que son clientes habituales y vecinos de la zona. Agradeció a su clientela la fidelidad demostrada siempre, "porque se portan muy bien conmigo". Su agradecimiento lo hizo extensible a la Once, porque la organización "nos ayuda cada día a seguir adelante". Joaquín Martínez lleva desde 2003 en este puesto en el Barrio de la Victoria, pero pertenece a la Once desde hace 29 años.
Este hombre sencillo asegura sentirse tan emocionado como los ganadores y que cuando le llamaron desde la Once para comunicarle que había entregado el cuponazo, se pasó toda la noche sin dormir por los nervios. "Son diez boletos vendidos y estoy muy feliz".
Pero no es la primera vez que Joaquín Martínez se ha convertido en mensajero de la buena suerte, porque reconoce que con anterioridad entregó dos premios importantes, como era uno de 2,5 millones de pesetas y otro de cinco millones de pesetas. Este vendedor, que no busca ni espera gratificaciones, sólo desea que los clientes sigan acercándose a su puesto y se lleve su cupón.
