La plataforma que se conformó tras la prohibición del paso de borregos desde Marruecos a la ciudad para la celebración del Aid El Kebir ha llevado un escrito similar al que envió al Congreso de los Diputados pero en esta ocasión a la Presidencia del Gobierno y al Defensor del Pueblo. En el escrito, vuelven a insistir en que la medida que se tomó para el pasado 12 de septiembre, fue "arbitraria" y se enmarca en una "dilatada historia de agravios y humillaciones" que sufren los melillenses musulmanes por parte de las autoridades. La plataforma que se conformó tras la prohibición del paso de borregos desde Marruecos a la ciudad para la celebración del Aid El Kebir ha llevado un escrito similar al que envió al Congreso de los Diputados pero en esta ocasión a la Presidencia del Gobierno y al Defensor del Pueblo.
En el escrito, vuelven a insistir en que la medida que se tomó para el pasado 12 de septiembre, fue "arbitraria" y se enmarca en una "dilatada historia de agravios y humillaciones" que sufren los melillenses musulmanes por parte de las autoridades.
Asimismo, aquejan que "en su propia tierra, sufren los paupérrimos indicadores sociales, resultado de un histórica discriminación, que lejos de corregirse se perpetúa, con el consiguiente peligro para la paz social".
Libertad religiosa
En el escrito los firmantes vuelven a "comprobar con estupor e indignación la cerrazón e ilegalidad en la que incurren las autoridades, con absoluto desprecio a la libertad religiosa".
Un derecho, indican, reconocido en el artículo 16 de la Constitución y que aparece regulada en la Ley Orgánica 7/1985, 5 de julio de Libertad Religiosa, se distingue por su ejercicio comunitario o colectivo (sin perjuicio de su componente individual), y comprende, como parte de su contenido esencial, el derecho a celebrar sus propias festividades conforme a sus prescripciones religiosas.
