Afortunadamente, en el entrenamiento de ayer Pablo Almazán, Alfredo Ott y Oliver Arteaga participaron aunque a menos ritmo que el resto. Por otro lado, Eloy Almazán y Marcos Suka trabajaron al margen del grupo junto al fisioterapeuta del club. El Melilla Baloncesto comenzó ayer a preparar el inicio liguero en las instalaciones municipales del Pabellón Javier Imbroda, en la primera de las seis sesiones de trabajo que aguardan a los hombres de Alejandro Alcoba de aquí al viernes. Así, el conjunto azulino encara ya la recta final de su preparación y se prepara para el partido ante el conjunto gallego del Marín Peixegalego, correspondiente a la primera jornada de la LEB Oro, que se celebrará, a partir de las 21’00 horas, en A Raña.
Tras disputar este pasado fin de semana sus dos últimos amistosos de pretemporada y gozar de descanso el domingo, los jugadores volvieron a los entrenamientos en la tarde de ayer con una sesión algo diferente a lo habitual, ya que antes del entreno de carácter técnico-táctico, en el que Alejandro Alcoba comenzó a preparar el partido en Marín, la plantilla se ejercitó durante cuarenta y cinco minutos en la sala de musculación del ‘Javier Imbroda’.
La mala suerte parece haberse cebado con el decano, que vio como en el último encuentro de pretemporada disputado ante el Seguros Soliss no pudo contar con hasta cinco jugadores de la primera plantilla. Afortunadamente, en el entrenamiento de ayer Pablo Almazán, Alfredo Ott y Oliver Arteaga participaron aunque a menos ritmo que el resto. Por otro lado, Eloy Almazán y Marcos Suka trabajaron al margen del grupo junto al fisioterapeuta del club.
Los azulones tienen programada una nueva doble sesión para hoy, mientras que mañana el equipo entrenará por la tarde y el jueves por la mañana, en la última sesión preparatoria antes de viajar a Galicia.
