Rey Enrique Gutiérrez ya se encuentra a las órdenes del cuerpo técnico del BM. Virgen de la Victoria de Melilla. El cancerbero cubano llegó ayer martes a nuestra ciudad pasado el mediodía y por la tarde entrenó junto a sus nuevos compañeros en el Pabellón Municipal Lázaro Fernández. Está nacionalizado español, tiene 46 años y mide 1’95 metros. Es un experimentado cancerbero y ex internacional con Cuba. En las últimas campañas ha militado en equipos punteros de España. En la temporada 2013-2014 lograba el ascenso a la Liga ASOBAL con el Balonmano Benidorm y posteriormente llegó a disputar la fase de ascenso con el Balonmano Valladolid. Su trayectoria deportiva es bastante extensa, ya que ha pasado por los siguientes clubes: Saint Cyrs Touraine Handball (Francia), Dinamo de Minsk (Bielorusia), Chacón de Lanzarote, Sedalo de Argentina, K.A. (Islandia), Elda de Alicante, Ceuta, BM. Huesca, Almoradí de Alicante y Vinaroz de Castellón. Rey Enrique realizó ayer martes sus primeras declaraciones a MELILLA HOY como nuevo componente de la plantilla del Balonmano Virgen de la Victoria y explicó cómo se ha fraguado su fichaje por el conjunto melillense. «Hemos buscado la mejor vía para todos y al final ha sido posible, pues tenía muchas ganas de venir a Melilla», afirmó.
A este respecto, destacó que ya conocía nuestra ciudad, pues ha venido muchas veces a jugar contra el desaparecido Ebidem con los equipos del Almoradí y del Elda. «Nunca había jugado en un equipo de Melilla, pero Nacho Vico se puso en contacto conmigo, me habló del proyecto del club y de llevar al equipo lo más alto posible. Me preguntó si estaba disponible para echar una mano, pese a que era tarde en cuanto a la confección del plantel. Por este motivo, me ha sido complicado poder salir del equipo de Francia, pues casi todos los jugadores ya están fichados y era más difícil, pero afortunadamente ya estoy aquí».
Rey Enrique resaltó que es un portero “con experiencia, en buen estado físico y que pasa por su mejor momento”, pero sobre todo “espero darle seguridad al equipo de Melilla bajo los tres palos, ayudarle obviamente desde la defensa, aportar experiencia en los momentos claves de los partidos y saber estar”. En definitiva, “todas esas cosas que son importantes y que marcan las diferencias de ganar o perder un encuentro».
Por otro lado, se mostró convencido que el equipo melillense va a salir adelante. «El BM. Virgen de la Victoria cuenta con un gran entrenador y tiene mucha experiencia en el balonmano español. He jugado quince temporadas en todas las divisiones de España y creo que hay que darle un margen de trabajo a la plantilla para establecerse en la categoría. Los dos primeros meses de la competición son para ir conociendo la categoría, sin renunciar a nada, pero en la segunda vuelta este equipo es cuando estará hecho y sacará los puntos principales para lograr el objetivo principal, que es mantener la categoría en el primer año, aunque ya después se podrá apuntar a otras cosas».
También explicó cuáles son sus características como guardameta. «Yo manejo mucho lo que es el trabajo técnico-táctico y la visualización de los jugadores que tengo enfrente. Soy mixto, con un trabajo de reflejo, de rapidez, de experiencia, de colocación, de anticipación y de previo estudio de los jugadores rivales. Tengo un combinado de varias cosas, pues he pasado por muchas ligas diferentes, como Francia, Islandia, Bielorusia y España, además de la selección de Cuba».
«Todo ello me ha hecho coger un poco de bagaje de todas partes, pero digamos me aplico el cuento en la categoría en la que esté. A veces, haciendo más, consigues menos, pero en otras ocasiones, haciendo menos, siendo más efectivo, ganas más», concluyó el nuevo fichaje del conjunto melillense.
