La Escuela de Música de la Banda, Orquesta Sinfónica y Coro "Ciudad de Melilla" inicia su curso musical con más 270 alumnos y un total de 437 matrículas en sus diferentes especialidades, experimentando un crecimiento del 18% comparado con datos del curso anterior. Un total de 14 profesores integran la plantilla actual. El centro musical tiene como fin principal, la formación de músicos que pasarán a integrar, en un primer momento la Banda Juvenil, la Orquesta Joven, y diferentes agrupaciones corales, para más tarde dar el salto a las agrupaciones mayores. La Banda Juvenil y la Orquesta Joven hicieron su aparición en la temporada 2008 en el Festival de final de curso y fueron recibidas con gran expectación por el público asistente, en su mayoría familiares de los pequeños músicos, que veían así un resultado espectacular a todo un año de trabajo y esfuerzo. Hoy por hoy, son ya formaciones asentadas que no dejan de crecer, dando cabida a los músicos que se forman en sus instalaciones. Su función es la de favorecer la cultura musical de la ciudad, que sin duda es demandada por todos los melillenses que suelen apoyar de forma muy positiva cualquiera de los diferentes eventos que se organizan.
Las especialidades ofertadas en la Escuela son: iniciación a la música, lenguaje musical, conjunto coral, violín, viola, violonchelo, clarinete, flauta travesera, saxofón, trompeta, trompa, percusión y canto. La edad para poder matricularse va desde los tres años y sin límite de edad para adultos, ya que se quiere brindar a todos la posibilidad de poder disfrutar de la música.
Entre las actividades más destacadas durante el curso escolar están: audiciones instrumentales individuales para ver la evolución de los alumnos, audiciones grupales por trimestre, y conciertos. Además desde diciembre se edita la Revista Pequegrama, de publicación trimestral y elaborada por profesores del centro que llega a los colegios e institutos de la ciudad, así como al conservatorio, para dar difusión de actividades realizadas, recursos didácticos y otros materiales de interés.
Inauguración
Aunque el curso se inició hace quince días, la inauguración oficial se realizó ayer con la visita a las instalaciones del viceconsejero de Festejos, Francisco Díaz, que destacó que la escuela es un proyecto consolidado con casi treinta años de vida, que da la posibilidad tanto a niños como a adultos de cualquier edad, de formarse en el mundo de la música.
Por su parte, Sergio Rincón, presidente Asociación Cultural de la Orquesta Sinfónica y Banda Ciudad de Melilla habló de que este año se ha producido un incremento del 20% en las matriculaciones de alumnos, que el centro cuenta con estudiantes que van desde los 3 a los 70 años y que en 2017 cumplirán treinta años de vida, lo que supone todo un revulsivo para la institución. El aumento de matriculaciones se ha registrado en las asignaturas grupales, las de coro y solfeo, que son las que pueden atender a más alumnos, mientras que en las otras especialidades, resulta imposible ampliar plazas porque no hay disponibilidad horaria.
Reconoció que el centro, situado junto a la Consejería de Educación, se ha quedado pequeño y no pueden aceptar a más alumnos, porque "tenemos clases con 30 y tampoco hay necesidad de tener más si no se les puede atender como lo merecen". Para que se diera una posible ampliación de profesores para atender a más estudiantes sería necesario disponer de más espacios, pero "aquí no se trata de coger más alumnos porque sí, sino que buscamos que aquellos que empiezan con 3 años, sean en el futuro la base de la orquesta grande". Afirmó que aunque los padres proponen el instrumento que desean que sus hijos aprendan, en la práctica el centro encauza según sus necesidades.
Sergio Rincón explicó que los más pequeños empiezan con un acercamiento a la música de forma lúdica, a través del juego, para que a los seis años puedan acercarse al instrumento que deseen. Además la música contribuye a mejorar la motricidad de los pequeños y los procesos cognitivos. El centro atiende a alumnos con necesidades educativas especiales, "hemos tenido alumnos ciegos y tenemos dos con síndrome y con autismo, para los que contamos con una profesora de audición y lenguaje".
