Alberto Monteagudo, entrenador del F.C. Cartagena, destacó lo complicado que es puntuar en el Estadio Municipal Álvarez Claro, donde su equipo nunca ha ganado desde que la U.D. Melilla ascendió a categoría nacional en junio de 1976. «Doy por bueno el empate, pues en esta categoría si empiezas perdiendo, luego es muy difícil ganar, y más ante un equipo como el Melilla, pero creo que en la segunda mitad mi equipo ha tenido personalidad».
Precisamente, sobre la segunda mitad, dijo que su equipo empató el partido a balón parado y dominó la pelota. «En peligrosidad y llegadas a portería, hemos estado un punto por encima del rival y sobre todo en jugar la pelota, pero sabemos que cuando pierdes el balón, el Melilla sale rapidísimo, tiene jugadores que te meten ahí y casi perdemos el partido en el minuto noventa con el paradón que ha realizado Limones». El preparador del cuadro departamental se deshizo en elogios hacia su rival. «El Melilla tiene una manera muy determinada de jugar. Sus jugadores son muy intensos, juegan lejos de su portería y los despejes son todos a las espaldas del rival. Lo hacen a las mil maravillas. Estudiamos la manera de hacerles daño, especialmente desde nuestro extremo derecho. En la primera parte tuvimos dos oportunidades en las que se fue contra el portero, y el Melilla tuvo el tiro que paró Limones y mandó al palo».
«En esta mitad hemos jugado a lo que el Melilla hace bien. Nos faltó triangulación, pero en la segunda parte tuvimos ocasiones para ganar el partido. Me quedo con una sensación agridulce, pero al final ellos te pueden ganar y te vas contento. En conjunto, por ocasiones claras, podríamos haber ganado, pero doy por bueno el punto por esfuerzo, trabajo, y lo difícil del campo», explicó el preparador de los murcianos.
«La sensación que tengo del Melilla es que es un equipo comprometido, trabajador y que tiene muy claro la manera de jugar. Va a ser difícil. Ya se lo comenté a mis jugaores, que no es casualicad que un equipo no haya perdido un partido en ocho jornadas y que además sólo había encajado dos goles. Eso no es de un día para otro ni suerte. Seguramente perderá partidos, pero no es fácil ganar aquí», resaltó sobre el rival.
Por último, se refirió a la jugada del penalti. «El línea le marcó al árbitro saque de puerta, pero éste tomó su decisión. Mi jugador me ha comentado que tiene la posicion ganada y que abre los brazos para no dejar pasar a Kiu y chocó contra su brazo. Se puede intrepetar como un codazo, pero el que más cerca estaba de la jugada es el línea, que es lo que le reclamo desde el banquilo. Al final te pones perdienod el partido y luego es bastante complicado», concluyó Monteagudo.
