El PP mostraba su preocupación ante la posible arbitrariedad con la que se pudiera impartir la enseñanza religiosa islámica en los centros educativos de Melilla, así como la escolarización de los menores extranjeros no acompañados. La ausencia entonces de programas, libros de textos y sistemas regulares de estudios, así como la selección de los profesores por parte de la Comisión Islámica podía llevar a la impartición de enseñanzas extrarreligiosas, manifestaba el PP. Los inmigrantes centroafricanos atendidos por la Ciudad denunciaban la escasez de alimentos que recibía y pedían documentos para salir de Melilla. El grupo Argentaria presentaba su producto “Argentaria-Ahorro”, un fondo de inversión colectiva creado para Melilla y Ceuta.