El juez decano de Melilla, Fernando Germán Portillo ha asistido a las ‘XXVI Jornadas Nacionales de Jueces Decanos de España’, en las que se ha representado a más de 2.000 magistrados. El encuentro, que ha tenido lugar en Málaga, ha servido para que los profesionales eleven la voz y soliciten un Pacto de Estado. Pretenden que se materialice mediante el compromiso político de mejorar los ritmos y las deficiencias que arrastra la Justicia, para lo que son necesarias mayores inversiones. Según aseguró Portillo a este diario, los jueces decanos son quienes conocen de cerca las necesidades que atraviesa la Justicia, por lo que ruega que se haga caso a sus demandas.
El juez decano de Melilla, Fernando Germán Portillo, ha participado en las ‘XXVI Jornadas Nacionales de Jueces Decanos de España’, en las que se ha reivindicado un Pacto de Estado por la Justicia. El encuentro que ha tenido lugar en Málaga, habiendo representado a más de 2.000 magistrados, ha servido para elevar las reivindicaciones de un colectivo que demanda la “modernización judicial”, además del reconocimiento del “papel clave de la Justicia”.
Según destacó Portillo, en las jornadas se han puesto sobre la mesa peticiones “que no son nuevas, llevamos muchos años detrás de ellas”. Estas se centran sobretodo en que se produzca una mayor inversión en la Justicia, además de reclamar más voluntad política para atender las demandas de los jueces. “En España nunca ha habido interés por escuchar las peticiones de la Justicia”, sentenció ayer Portillo en declaraciones a este diario.
Según el juez decano de Melilla, la Justicia necesita “ser modernizada” y redefinida “para saber hacia dónde queremos ir”. En este sentido, indicó que se debe replantear “el modelo judicial que queremos” antes de diseñar uno nuevo. “Queremos un Pacto de Estado que se comprometa y sirva para dejar de improvisar en la Justicia, como se lleva haciendo en los 35 años de democracia”, sentenció.
Entre las conclusiones de las 26 jornadas nacionales de jueces decanos de España, Portillo rescató la que aborda la necesidad de “desjudicializar la vida política” para que la Justicia deje de ser utilizada “como un arma política” por los dirigentes de este país. Entre otras medidas, se ha planteado la imposibilidad de que una figura política se presente como acusación personal en un caso. También se han propuesto mecanismos para que, en función de la fase que alcance un proceso judicial, se puedan exigir responsabilidades antes de conocer la sentencia.
“Los jueces decanos somos los que tenemos conocimiento directo de los problemas que tiene la Justicia”, concluyó Portillo a este diario para incidir en la importancia de sus peticiones.
La Justicia, una prioridad “como la sanidad o la educación”
El juez decano de Málaga, José María Páez, afirmó tras finalizar las jornadas que comenzaron el lunes que llevan más de 25 años esperando este pacto «y hasta ahora hemos oído buenas palabras y buenas intenciones», pero añadió que ahora «incluso en las propuestas de acuerdo político se habla ya de él». Por esto, instó a que «se sienten y negocien ese pacto», añadiendo que «no se puede hacer política con la justicia».
Los jueces decanos señalaron en sus conclusiones que la Justicia «debe ser una prioridad, como la sanidad o la educación» , lamentando que actualmente «en España, no lo es». Al respecto, indicaron que «no existe una firme y decidida voluntad política para construir un poder judicial fuerte, moderno y eficaz». No obstante, «pese a las dificultades y a la escasa apuesta institucional por el sistema, la Justicia funciona», apuntaron. Los jueces decanos apuestan por un Pacto de Estado que incluya un plan director a medio o largo plazo.
