La caravana autonómica en dirección a la capital del país, partiría de Melilla el 13 de noviembre. El itinerario experimentaba un nuevo cambio, puesto que vez de Málaga, los viajeros llegarían a Almería y desde de allí a Granada y posteriormente la capital. El tope de melillenses participantes en esta caravana para reivindicar un estatuto para ambas ciudades se fijó en 750 personas.
La Policía expulsaba a un socio de raza negra de la A.V. Comunidad, a pesar de tener pagadas las cuotas. El desencadenante fue una protesta de la mujer del afectado por un juguete en mal estado.
El Ayuntamiento rendía homenaje a los melillenses ilustres fallecidos, con ocasión de la festividad de los Santos Difuntos.