El melillense Javier Imbroda, entrenador entonces del equipo de baloncesto del Mayoral malagueño, aceptaba el cargo de seleccionador del equipo nacional de Lituania, cargo que le proponía el Comité Olímpico de dicho país. Al parecer, tres jugadores, entre ellos Sabonis habían pedido que fuese Imbroda el seleccionador, al objeto de ampliar las posibilidades de éxito de une quipo muy potente como era el lituano que se suponía podría hacer sombra a los profesionales de la NBA en los Juegos Olímpicos de Barcelona´92.
El periódico también se hacía eco en su portada, de la noticia de que las autoridades estatales habían impedido a distintas organizaciones de "skin heads" o “cabezas rapadas” la celebración de manifestaciones en Madrid.