Según Ruiz Barranco, el intento de entrada del viernes se debió a “un cúmulo de circunstancias”, entre ellas las obras de remodelación que se están llevando a cabo en la frontera de Farhana, que en esas condiciones “no tiene la seguridad que debería tener” y los inmigrantes lo aprovechan porque actualmente “es una puerta rota” y “no tiene tampoco los medios técnicos que debería tener”. Ante ello, el SUP insiste en que debería haberse cerrado la frontera mientras se efectúan las obras de remodelación, medida que no se ha adoptado porque “no lo quieren cerrar”. Los motivos no se han dado a conocer, pero el sindicato policial intuye cuáles pueden ser.
Ruiz Barranco aseguró que el SUP ya había advertido de ello una semana antes, aunque insistió en que lo que pasó en el paso de Farhana el viernes podría ocurrir en cualquiera de los pasos fronterizos, dado que esa mayor vulnerabilidad es común en todos.
Asimismo, recordó que su sindicato hizo tiempo atrás un protocolo de actuación ante situaciones como las que se están dando ahora en los pasos fronterizos, con “avalanchas” de personas y que todo el mundo sepa cómo se pueden controlar.
