Diversos amigos de Juan Manuel Coronil testificaron en la tarde de ayer a petición de su defensa para que ratificaran que el acusado nunca había mostrado una actitud agresiva en ninguna de las situaciones. Todos empezaban de la misma forma: "Lo conozco de toda la vida". Así, ratificaron el cambio de conducta desde el accidente que sufrió en 2005 con su moto y que nunca habían visto a Coronil tener ninguna actitud violenta. Esto hizo que entre anécdotas y 'piropos' a la personalidad del acusado éste estallara a llorar al igual que los propios testigos y la propia familia de Coronil. Todo eran palabras de cariño y defensa a Juan Manuel Coronil por parte de los amigos que declararon durante la vista a petición de la defensa y con el fin de demostrar que el acusado no era una persona violenta y que tuvo un cambio de personalidad desde el accidente de moto que sufrió en 2005.
"Lo conocía de toda la vida", aseguraron todos, toda vez, que incluso dos de los tres amigos de Coronil llegaron a señalar que la confianza era tan plena en el acusado que dejaban a sus hijos con él y que incluso sus hijos a día de hoy le siguen preguntando por Coronil. Esto hizo estallar a llorar a media sala de la Audiencia incluido el acusado, a quien el magistrado le indicó que si no se encontraba bien podían suspender la sesión hasta la mañana de hoy, aunque él prefirió continuar.
Aún así, a ninguno le contó nada de lo que ocurrió aquella madrugada del 28 de octubre de 2013, e incluso a una de sus mejores amigas ni le cogió el teléfono después de aquel día.
Sin embargo, y como todas las declaraciones van dirigidas a los componentes del Tribunal Jurado para aclarar los hechos, la fiscal quiso interrogar también a cada uno de los amigos. Así, se dejó constancia de que ninguno estuvo en la madrugada en la que habría acabado con la vida de Manae, ninguno sabía que Coronil había contratado alguna vez a una prostituta, y ninguno quería que el acusado terminara en prisión.
